Las temperaturas previstas para estos días en la provincia de Zamora se corresponden a lo que se denomina una ola de calor, que en estas latitudes se activa a partir de 35,6 grados de máxima, nivel que se superará hoy cuando está previsto que se alcancen los 36 grados. Los últimos datos de la Agencia Estatal de Meteorología apuntan a máximas de 36 grados hoy y el viernes, 38 el sábado, 36 el domingo (se habían anunciado 40, pero no llegarán a tanto), 34 el lunes y 35 el martes, con mínimas que van subiendo desde los 16 grados de hoy y mañana a los 18 del sábado, 19 de domingo y lunes y 17 grados del martes.

Un factor a tener en cuenta es el índice ultravioleta, que sube a 10 durante la jornada de hoy y está previsto que pase a 11 (un valor extremo) a partir del domingo, lo que obliga a redoblar las precauciones para tomar el sol.

Más allá de los inconvenientes de falta de confort que lleva aparejado, el calor se convierte también en un elemento peligroso para la salud. El verano pasado no se registraron fallecimientos como consecuencia de los episodios de calor veraniego, pero en el de 2017 hubo dos muertes en Zamora, de un hombre de 81 años y una mujer de 62 atribuidas directamente a síncopes por calor. En ambos casos había factores que favorecieron este desenlace, como enfermedades cardiovasculares previas o la realización de actividades deportivas o laborales al aire libre.

De hecho la Junta tiene activado desde el 1 de junio al 15 de septiembre un sistema de vigilancia de la mortalidad por temperaturas elevadas con el fin de monitorizar el aumento de fallecimientos debido a la elevación de las temperaturas.

Recomendaciones

De ahí la importancia de hacer caso a las recomendaciones de las autoridades sanitarias. Deben tener especial cuidado los colectivos de personas mayores, discapacitadas y los niños menores de 5 años, los enfermos crónicos (hipertensión, diabetes, cardiopatía, obesidad, alcoholismo), quienes tomen medicación habitualmente y aquellos que realizan trabajos físicos intensos o deporte al aire libre cuando hay temperaturas elevadas.

El exceso de calor puede producir calambres, por pérdida de sales, agotamiento (malestar, dolor de cabeza, nauseas, vómitos, sed intensa), deshidratación (decaimiento y sensación de postración) y golpe de calor , caracterizado por nauseas, vómitos, dolor de cabeza, piel caliente y enrojecida, aumento de la temperatura corporal por encima de 40 grados, inestabilidad al andar, mareos, incluso convulsiones.