Sareb acumula en la provincia cerca de 400 activos desde la crisis inmobiliaria

El anuncio del Gobierno para movilizar propiedades del "banco malo" puede dar salida a 79 viviendas y 255 promociones abandonadas

Parcela de Sareb en Vista Alegre.

Parcela de Sareb en Vista Alegre. / Ana Burrieza

Luis Garrido

Luis Garrido

El Gobierno de España promete dar una salida digna a los activos que tiene en cartera el "banco malo" una década después de su creación. La intención es movilizar el parque inmobiliario que actualmente está parado para darle un uso social y asequible para los bolsillos de las personas más vulnerables. En la provincia de Zamora son cerca de 400 propiedades las que posee la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) sin que hasta la fecha haya podido hacer nada con ellas. Viviendas, anejos, parcelas, obras en curso y locales que se reparten por una docena de municipios y que ahora podrían servir para desahogar la vida de quienes peor lo están pasando.

Cuatro inmobiliarias gestionan en la provincia de Zamora los activos de la Sareb y a través de ellas se puede hacer una radiografía de lo que podría significar la medida anunciada por Pedro Sánchez para devolver al mercado este lastre procedente de la crisis inmobiliaria. Benavente, Bermillo de Sayago, Coreses, Corrales, Manganeses de la Lampreana, Monfarracinos, Morales de Toro, Morales del Vino, Roales, Toro, Trabazos, Villaralbo y Zamora capital son algunas de las localidades donde se pueden encontrar propiedades del “banco malo”. Ahora bien, hay que tener en cuenta que no todo lo que se conserva son pisos que se podrían poner inmediatamente a disposición de los usuarios.

400 activos, la mayoría, obras en curso

De los casi 400 activos que maneja la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) en la provincia de Zamora, tan solo 79 unidades se corresponden con viviendas. La mayor parte de las propiedades son las denominadas obras en curso; que no son tal, porque se trata única y exclusivamente de cadáveres de ladrillo abandonados. Estas suman 255 unidades en el conjunto territorial y se pueden encontrar en prácticamente cualquier punto del mapa donde se señale. En la capital, por ejemplo, aparecen en el barrio de San Frontis, en Pinilla o en Vista Alegre. Aunque también hay una promoción de chalets parada en Morales de Toro, viviendas en Benavente o activos en Morales del Vino. Esta última localidad, en clara expansión y a la que afectó también el pinchazo de la burbuja a finales de la primera década del nuevo siglo.

Solar donde Sareb promociona desde hace más de dos años nuevas viviendas. | Jose Luis Fernández

Solar donde Sareb promociona desde hace más de dos años nuevas viviendas. | Jose Luis Fernández / Luis Garrido

Pero esto solo es parte de todo el conglomerado que maneja el "banco malo". A las 255 obras en curso y 79 viviendas hay que añadir 40 parcelas de suelo, 14 locales y siete anejos. Un listado que no incluye, eso sí, los activos que no son propiedad de la compañía, como aquellos que figuran como garantías de préstamos o que se encuentran en proceso de toma de posesión de la propia Sareb.

A lo largo de los últimos años ha habido intentos de devolver parte de estos activos al mercado. Por ejemplo, en septiembre de 2020, el Ayuntamiento de Zamora aprobó el expediente para la normalización de los terrenos situados entre el pabellón de la Diputación y el Hospital Provincial de cara a una futura promoción inmobiliaria. Lo hizo a petición de la Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb). Se trata de una parcela sobre la que se sitúa un "agujero" fruto de una frustrada construcción en el pasado. Los terrenos pertenecen al 50% al denominado “banco malo” y a la Diputación Provincial, aunque la operación incluía también una liberación de espacio para uso público en la que se habilitará un jardín. Sin embargo, dos años y medio después, la parcela sigue exactamente como estaba y nada se sabe sobre esa construcción que se planteaba.

Ahora, el anuncio realizado por el Gobierno de España promete dar una segunda vida a todos estos activos amasados por el "banco malo" a lo largo de los años que han transcurrido desde el pinchazo de la burbuja inmobiliaria. Zamora espera noticias.

Alquiler social y venta por parte de los ayuntamientos y comunidades

El Gobierno de España ha anunciado que el plan de la Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) servirá para movilizar hasta 50.000 viviendas para alquiler social y asequible procedentes de su cartera de inmuebles y de la cesión de suelos urbanizables. Sareb cuenta actualmente con un potencial de vivienda terminada para uso social de 21.000 unidades que se pondrá a disposición de las comunidades autónomas y ayuntamientos para su venta, además de otras 14.000 ya habitadas y sobre las que está trabajando para identificar a las familias vulnerables y ofrecerles un programa de alquiler social y acompañamiento laboral.

Además, dispone de suelos en los que podrían promoverse hasta 15.000 viviendas adicionales destinadas al alquiler asequible. Esta iniciativa se integra en las actuaciones previstas en el plan estatal de acceso a la vivienda 2022-2025 que tiene el objetivo de incrementar el parque público de vivienda en cien mil unidades y se suma a las medidas en marcha para facilitar el acceso a una vivienda.

La cesión de suelo, una "medida frente al reto demográfico"

La cesión de suelos urbanizables contribuirá al objetivo de cohesión territorial en el marco del Proyecto Reto Demográfico para implantar proyectos empresariales y de industrialización en la España rural. Eso es lo que dice el Gobierno de España, que tiene entre manos que Sareb ofrezca a las administraciones públicas la venta de suelos destinados a objetivos sociales como la construcción de hospitales, escuelas u otros espacios públicos. Tanto las viviendas como los suelos tienen una distribución geográfica asimétrica y no siguen un criterio poblacional, sino de disponibilidad de los inmuebles que poseían las entidades financieras y pasaron a formar parte de Sareb. Un 60% de estos bienes se concentran en el arco mediterráneo, principalmente en Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía. En la comunidad autónoma de Castilla y León los activos son menos cuantiosos, pero se trabajará para ponerlos a disposición.

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