Requejo confía en aprobar el presupuesto antes de Navidad

El último presupuesto del bipartito que está gobernando la Diputación de Zamora durante el mandato 2019-2023 está casi a punto. De hecho, el presidente de la institución, Francisco José Requejo, confía en tenerlo aprobado en Pleno antes de Navidad, con el fin de que supere a partir de ahí todo el proceso de tramitación y entre en vigor lo antes posible. Si todo marcha bien, la propuesta del Partido Popular y Ciudadanos se debatirá en la sesión ordinaria del 16 de diciembre; si la cuestión se demora, el equipo de Gobierno prevé convocar al órgano de forma extraordinaria para el día 22.

"Todo acordado"

Según Requejo, la negociación en el seno del bipartito avanza sin contratiempos, “con todo acordado” para aprobar el cuarto y último presupuesto del mandato. El Partido Popular y Ciudadanos tienen los votos suficientes como para aprobar su proyecto en el Pleno por mayoría absoluta, por lo que no se esperan grandes sorpresas en la votación.

Lo que sí conviene contemplar es que los dos socios actuales solo tienen garantizada su continuidad hasta pasadas las elecciones de mayo, por lo que será el equipo que salga de las urnas el que gestione el dinero de la Diputación durante el segundo semestre de 2023. La intención de Requejo y los suyos es habilitar partidas para rematar los proyectos pendientes antes de los comicios y dejar encarrilados también algunos asuntos que quedarán, de forma irremisible, como herencia para quien llegue a La Encarnación.

Dinero para Fromago

El propio presidente deslizó hace días que una de las iniciativas que dejará encaminadas antes de someter su continuidad al examen de la ciudadanía es la organización de la edición 2024 de la feria Fromago, que contará con una partida ambiciosa ya en 2023.

Por lo demás, se espera un presupuesto “bastante inversor”, según dejó caer Requejo, que de la mano de Ciudadanos encara el final del mandato con el pacto junto al Partido Popular en pie y con el objetivo de apurar su tiempo como presidente para dejar el trabajo lo más cerrado posible.