El Zamora CF se juega su futuro

Sabiendo que su futuro está en juego. Así afronta el Zamora CF el partido que tiene este mediodía en casa del Sporting B y es que a falta de cuatro jornadas para que termine la competición, y en puestos de descenso directo, el equipo rojiblanco no puede permitirse ni un solo fallo más puesto que cualquier tropiezo puede dejarles heridos de muerte en esta lucha por la permanencia. Ha sido una semana movida que comenzó con la ratificación de Roberto Aguirre al frente del banquillo y con un vestuario que ha querido cerrar filas y centrarse en el aspecto deportivo, conscientes de la necesidad que tienen de victoria a estas alturas de Liga y es que han llegado a la recta final con los deberes sin hacer y huyendo del descenso a Tercera.

Así, dispuestos a dar su mejor versión, la expedición se desplazó ayer a Gijón con las bajas de Dani Mateos y Coque, por lesión, y de Carrillo, por sanción, por lo que en la lista de 16 vuelve a estar el juvenil Álvaro de la Iglesia y por primera vez Tomás, banda de carácter ofensivo y, también, en edad juvenil. Pese a todas las vicisitudes hoy no se pueden permitir ni la más mínima duda ante un rival que con 43 puntos está a punto de zanjar su permanencia aunque el peligro, más allá del aspecto colectivo, está en el individual puesto que se trata de jugadores que quieren despuntar y brillar sobre el resto para alcanzar algún día el primer equipo. "Para nosotros es un partido decisivo. Si ganamos, cumpliríamos el objetivo ya que con 46 puntos, prácticamente estás salvado. Es un partido muy importante porque todos deseamos ese objetivo" explicó el entrenador del filial asturiano quien también es consciente de que en este partido "Lealtad y Langreo son del Sporting B a muerte" puesto que son dos de los equipos con los que los zamoranos se están disputando la salvación.

Tomás Hervás también habló durante la semana de su rival del que comentó que le sorprendía su situación en la tabla. "Es un equipo bastante joven para Segunda B, pero tiene un buen entrenador, están bien organizados y tienen recursos en ataque", indicó, mientras que Roberto Aguirre tampoco escatimó en elogios hacia su contrincante del que destacó su "dinamismo, organización y calidad".

Con estas premisas lo verdaderamente importante llegará a las doce del mediodía, cuando el balón empiece a rodar, y será en ese momento cuando los rojiblancos deberán dar lo mejor de sí mismos y recuperar la confianza que parecen haber perdido en los últimos meses, además de rescatar su olfato goleador y es que al equipo le cuesta mucho abrir los marcadores. Por lo que respecta al equipo que Aguirre pondrá en juega, no se esperan muchos cambios respecto al último que salió ante el Real Oviedo, aunque habrá alguno obligado. Así, una de las posibilidades pasa por Miguel bajo los palos; defensa con Álvaro, Dejan, Garretas y Prada; centro del campo para Cristian y Ochoa; bandas para Arkaitz y Aarón, para terminar con Rodri y Gavilán como hombres de ataque. En este encuentro, y a pesar de que al final no salió el autobús que puso el club, sí se espera presencia de seguidores zamoranos que se desplacen en coches particulares por lo que la plantilla sí podrá sentir el aliento de una pequeña representación de sus aficionados en este encuentro del que deben salir con el máximo botín que les permita acercarse a la permanencia.