La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha vuelto a hacer una encendida defensa del dirigente de Nuevas Generaciones Angel Carromero que fue extraditad a España a finales de diciembre para cumplir la condena de cuatro años por homicidio que le fue impuesta en Cuba por el accidente de tráfico ocurrido el 22 de julio pasado y que costó la vida a dos opositores, Harold Cepero y Oswaldo Payá, que viajaban con él. Aguirre, al ser cuestionada por el ingreso de Carromero en un hospital cubano, ha dejado caer que fue "sedado". "Fue a un hospital normal y de repente el hospital se militarizó. A Angel le pusieron un suero y ya no recuerda nada. Estuvo sedado seguro o le meterían algo qué se yo".