Bodas de plata de "Las Marujas" de Toro

La murga carnavalera celebra el 25 aniversario de su primera participación en una fiesta que es "sagrada", a la que aporta dosis de ingenio y buen humor

Las integrantes de la murga entonan sus coplas en un concurso anterior celebrado en el Teatro Latorre. | M. J. C.

Las integrantes de la murga entonan sus coplas en un concurso anterior celebrado en el Teatro Latorre. | M. J. C. / María Jesús Cachazo

Enfundadas en sus batas de estar por casa, "Las Marujas con Denominación de Origen" participaron por primera vez en el Carnaval de Toro hace 25 años. Desde entonces, la murga se ha convertido en un referente festivo que, además, ha logrado transmitir su espíritu y su particular forma de interpretar el Carnaval a las nuevas generaciones.

En su 25 aniversario, dos fundadoras de "Las Marujas con Denominación de Origen", María José González y Rosa García, recuerdan con una sonrisa los orígenes de la murga, que se remontan a una fiesta de los quintos que, junto a sus maridos, los integrantes de otra agrupación carnavalera, "Los Peseteros", celebraron de forma conjunta.

Desafío

En esa reunión familiar se fraguó la murga, después de aceptar el reto de uno de los integrantes de "Los Peseteros", Francisco de la Calle, quien aseguró que las mujeres presentes "no tenían narices" para cantar una copla en Carnaval. Lejos de amedrentarse, las esposas de "Los Peseteros" aceptaron el desafío, aunque tan solo faltaban unos días para el comienzo de las fiestas y no disponían de tiempo suficiente para confeccionar un disfraz y componer una copla.

El problema del disfraz lo solventaron con ingenio y decidieron salir en Carnaval ataviadas con sus batas. El siguiente paso fue elegir un nombre y el que más se ajustaba a su primer disfraz era el de "Las Marujas", al que añadieron una de las señas de identidad de Toro, su Denominación de Origen.

A diferencia de "Los Peseteros" ninguna de sus integrantes tenía conocimientos de música para componer una copla, pero lograron convencer al marido de González, Antonio Carrasco, que no dudó a la hora de colaborar y, desde entonces, es el único miembro masculino de la murga.

"Las Marujas con Denominación de Origen" recuerdan con emoción la primera vez que, como murga, participaron en el Carnaval y en el concurso de coplas, su evento preferido, aunque anteriormente disfrutaban activamente de las fiestas acompañando a sus hijos en el desfile infantil.

«Las Marujas» y Antonio Carrasco lucen sus disfraces. | Cedida

«Las Marujas» y Antonio Carrasco lucen sus disfraces. | Cedida / María Jesús Cachazo

Desde entonces, la murga ha logrado incorporar a aquellas hijas o sobrinas con las que desfilaban hace años y que, en la actualidad, se han integrado plenamente y han reavivado el latido de "Las Marujas con Denominación de Origen". Todas sus integrantes son "esposas, madres o hijas" de "Los Peseteros", con los que mantienen cierta rivalidad, aunque cada murga vive por separado y de una forma diferente la fiesta. "En casa no se habla del carnaval", asegura García, porque la competencia traspasa los límites del hogar.

En casa no se habla del Carnaval

De hecho, aseguran que cuando "Los Peseteros" ganan el concurso de coplas "nosotras nos alegramos", pero algunos de ellos "no lo hacen cuando ganamos nosotras, y eso que son nuestros maridos e hijos y les hacemos los disfraces".

A diferencia de otras murgas, "Las Marujas con Denominación de Origen" se caracterizan por unas coplas en las que dejan de lado la política, para centrarse en cuestiones relacionadas con el día a día de las mujeres y amas de casa, aunque en sus letras también incorporan mensajes irónicos dirigidos a sus maridos y, por extensión, a los hombres.

La murga, en su primera participación en carnaval de Toro. | Cedida

La murga, en su primera participación en carnaval de Toro. | Cedida / María Jesús Cachazo

Preparativos

Cada año, en las fechas en las que en Toro festeja la Vendimia, la murga celebra la primera reunión preparatoria del Carnaval y, a partir del puente de diciembre, comienzan los ensayos, en los que dan forma a sus ideas sobre las coplas y los disfraces que van a lucir en las fiestas.

Reconocen las integrantes de la murga la complejidad de componer coplas y, aunque en los últimos años con la colaboración de Carrasco y las ideas aportadas por las integrantes más jóvenes, han logrado crear sus propias melodías, los inicios fueron complicados y tuvieron que recurrir a la ayuda de "Los Peseteros" y de otros históricos carnavaleros.

Hace 25 años hasta once murgas, de las que varias eran infantiles, entonaron sus coplas de carnaval mientras que, en la actualidad, tan solo cuatro se suben al escenario del Teatro Latorre para, con sus melodías, propiciar la diversión del público. "Las Marujas con Denominación de Origen" apuestan por incentivar la creación de más murgas, aunque también consideran necesario incorporar nuevos actos al programa festivo, porque "cada año se repite".

En las reuniones preparatorias del Carnaval, las componentes de la murga también aportan ideas sobre el disfraz y, una vez elegida una opción, diseñan el modelo, adquieren las telas y complementos y, puntada a puntada, dan forma al boceto. Además, cada año adaptan el disfraz que lucen en los días de Carnaval a alguna de sus señas de identidad como "Marujas" o a la Denominación de Origen, para mantener viva su esencia.

Tras 25 años disfrutando del Carnaval integrantes de la murga reconocen que, en la actualidad, las fiestas se disfrutan de otra manera, especialmente los jóvenes que, en grupos, sí se disfrazan en la noche del sábado, pero no participan en los desfiles. Quizás, por este motivo, en los últimos años uno de los actos centrales de las fiestas es el desfile infantil, mientras que el de adultos no cuenta con tanta participación como en otras épocas.

Del mismo modo, apuntaron que, hace años, "salíamos todos los días" de Carnaval, porque por las noches se celebraban fiestas temáticas como la del "cambio de sexo", en la que hombres y mujeres intercambiaban sus prendas de vestir. Además, precisaron que, en otras épocas, todos los disfraces eran artesanales, a diferencia de la tendencia actual de algunos participantes que adquieren los trajes.

Las componentes de la agrupación, en una edición anterior del carnaval

Las componentes de la agrupación, en una edición anterior del carnaval / Cedida

Del mismo modo, precisaron que el entierro de la sardina ha decaído en los últimos años, en parte, porque tan solo las integrantes de su murga y algunos miembros de otra agrupación se visten de luto para la ocasión, a pesar de que la participación de las agrupaciones carnavaleras es obligatoria. Para las integrantes de la murga "el Carnaval es sagrado" y, aunque por circunstancias familiares o labores, algunas han residido un tiempo fuera de Toro, cada año regresaban para celebrar las fiestas.

El Carnaval de Toro es distinto, porque se interpreta

A pesar de que en otras localidades próximas el Carnaval se ha convertido en una celebración importante en los últimos años, para "Las Marujas con Denominación de Origen" el de Toro es "distinto", porque "se interpreta" y, en la mayoría de los casos, los disfraces son de manufactura artesanal y el fruto de un ingenio que no tiene límites.

La murga celebra este año su 25 aniversario con las mismas ganas que la primera vez que se subió a un escenario para entonar sus coplas y con el deseo de que las nuevas generaciones sigan luchando para mantener la esencia de una fiesta que corre por sus venas y que alientan desde el corazón.

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