Razonar produce placer

Los nacionalismos son la recíproca disculpa de quienes odian la igualdad de derechos

Alfonso Vázquez  Vaamonde

Alfonso Vázquez Vaamonde

Los seres vivos sentimos, los humanos razonamos. En el S. XIX la internacional socialista buscaron la convivencia transnacional: "Uníos Hermanos Proletarios" fue el grito humanitario para evitar las pendencias "regias" entre países donde los súbditos no tenían derecho al voto. La iglesia también les engañó "al rey la hacienda y la vida se ha de dar" fue su trampa. Se los vendía y heredaba junto con la "finca regia". Eran "su fuerza animal de trabajo"; como las ovejas para esquilarlas o las mulas para transporte; como ellas, tampoco votaban, ni sabían leer.

En "La servidumbre voluntaria" de la Boetíe demostró siglos antes lo irracional de la monarquía hereditaria. Resolvían sus pendencias familiares enfrentando a muerte a sus "animales domésticos" a los "animales domésticos" del otro rey. De triunfar la internacional socialista el asesinato del archiduque de Austria sólo fuera un asesinato que resolverían los tribunales de justicia. En su lugar se organizó la I Guerra Mundial; el primer genocidio del S. XX; mayor que el actual genocidio de los terroristas sionistas en Palestina. Las Repúblicas que reconocían "los derechos del hombre y del ciudadano", no aún de la ciudadana, substituyeron el engaño del "mandato divino del rey" por el engaño de la "defensa de la patria". Millones de inocentes y pacíficos "animales domésticos" dieron "la hacienda y la vida" matando a otros millones igualmente inocentes. Fue triste que las repúblicas democráticas se convirtieran en "otro perro con el mismo collar".

Sus mártires fueron los "soldados desconocidos" obligados a ir a las trincheras. Gritaban "no nos matemos, abracémonos". Sus respectivos oficiales les asesinaron tras "el juicio justo" previo al asesinato judicial por "traición al rey y a la patria". Millones de personas muertas y una inmensa infelicidad. fue la sanción a los inocentes obligados a ser asesinos. No aprendimos. La torpe paz "patriótica y nacionalista" con que terminó la guerra realimentó el racismo sionista de sangrienta actualidad que busca desde hace más de un siglo la solución final de los "palestinos musulmanes": el exterminio de los "demócratas pacíficos" que no lograron Hitler, Mussolini, Franco y tantos más. Los judíos europeos eran demócratas y progresistas. Los sionistas, racistas y nacionalistas son hijos del mismo romanticismo irracional del S. XIX que alimentó a Hitler.

La II Guerra Mundial la terminó Truman con el genocidio de Hiroshima y Nagasaki. Cometió el mismo genocidio que hubiera cometido Hitler de haber podido. El mismo sentido ético: ¡ninguno! A el añadió, violando la carta de la ONU robarle parte de Palestina a los palestinos, judíos, musulmanes, cristianos y otros creyentes, que levaban viviendo siglos en paz y dársela a un grupo de terroristas sionistas facilitándoles el genocidio de los musulmanes.

Un soplo racional engendró la CEE; su fruto fue la UE. Un milagro aun vivo. Dentro y fuera sigue la carcoma de la convivencia: el nacionalismo con sus tres disfraces: estatal, nacional y regional realimentándose. El collar cambia, el perro es el mismo

Un soplo racional engendró la CEE; su fruto fue la UE. Un milagro aun vivo. Dentro y fuera sigue la carcoma de la convivencia: el nacionalismo con sus tres disfraces: estatal, nacional y regional realimentándose. El collar cambia, el perro es el mismo. No se vuelvan a dejar engañar como en las dos Guerras Mundiales. Son la "reunión de pastore"”; Vd. es "la oveja muerta". Ahí está Yugoeslavia con su nacionalismo regional-religioso. La misma "solución final" para España: fusilar a veintiséis millones, tantos como votan a los partidos que apoyan a esos criminales impunes. Los jueces no ven delito de odio; solo libertad de opinión de los votantes que formarían su pelotón de fusilamiento.

Pasó en 1936; los militares jubilados no se atrevieron a darlo; ahora crean el ambiente del "necesario golpe de Estado". Los partidos opuestos a la ley de memoria histórica la ocultan a los jóvenes para que ignoren lo de 1936. Los "nacionalismos" son la recíproca disculpa de quienes odian la igualdad de derechos y resuelven su complejo de inferioridad declarando su superioridad y por ello su derecho a abusar. Las falsas disculpas raciales, religiosas e históricas son las más peligrosas; son "sentimentales"; no racionales. "Los naturales de Villanueva de Arriba no son de Villanueva de Abajo". "Ambos" tienen más derecho que el otro (?).

Esas "justificaciones racionales" permiten marginar por "tener menos derechos naturales objetivo"; así se justifica su "razonable" privación de derecho a la igualdad de derechos. Sumados dos o más "razonables" diferencias aun caben derechos superiores a los superiores: ocho apellidos, un siglo de antigüedad, descendencia matrilineal …

Es un asunto de salud mental. Pío Baroja dijo: "el nacionalismo se cura viajando"; Costa: "la solución es: escuela y merienda". El refrán dice: "se puede llevar la mula al abrevadero, pero no conseguir que beba". Si se enseña a razonar a los niños; aunque al principio mamen como las mulas aprender a beber vez de abrevar. Ayudémosles a ser felices: razonar produce placer.

(*) Abogado. Doctor en Química Industrial. Secretario General "Centro de Estudios Ateneos".

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