La imaginación, puesta al servicio de las letras

Los colegios se vuelcan en creatividad para sus proyectos de Lugares de Libro

Las diferentes culturas, presentes en el Juan XXIII. | J. L. F.

Las diferentes culturas, presentes en el Juan XXIII. | J. L. F. / B. Blanco García

Beatriz Blanco García

Beatriz Blanco García

Es una de las actividades en las que más se vuelcan los colegios, dentro de cada nueva edición de las Jornadas de Fomento de la Lectura. En esta octava edición, los centros educativos han echado mano de la imaginación para desarrollar sus proyectos de Lugares de Libro con originales propuestas que han llenado de color sus espacios, con una cuidada decoración.

Una «pirata» narra una historia en el Virgen del Castillo. | Cedida

Una «pirata» narra una historia en el Virgen del Castillo. | Cedida / B. Blanco García

Es el caso de Nuestra Señora de la Candelaria, con su iniciativa titulada "Leyendo entre estrellas", con el espacio exterior como inspiración y excusa para fomentar la lectura. "Se trata de un tema que siempre provoca mucha curiosidad en los niños", apunta la directora del colegio, Eva Malillos. La ciencia, la historia, el arte o la literatura son las áreas que se tratan en este lugar, que se puede visitar también por alumnos de otros colegios.

Uno de los rincones espaciales en La Candelaria. | Ana Burrieza

Uno de los rincones espaciales en La Candelaria. | Ana Burrieza / B. Blanco García

Y es que el objetivo de los Lugares de Libro es que se abra a otros centros, para compartir experiencias. En el caso de La Candelaria, los visitantes investigan sobre un tema relacionado con el espacio, plasman sus descubrimientos en diferentes formatos y hacen uso de recursos TIC. "En este proyecto ha participado toda la comunidad educativa, ya que los padres también se han implicado con la elaboración de algunas actividades, como un juego de la oca", pone como ejemplo.

Las puertas también están decoradas en La Candelaria. | A. B.

Las puertas también están decoradas en La Candelaria. | A. B. / B. Blanco García

Concienciados de las consecuencias que en el barrio de San José Obrero ha tenido la pandemia, desde el colegio Juan XXIII se ideó el proyecto "9 meses, 9 causas para leer", donde la lectura ayuda a ser mejores: aprender a ser, a estar y a reaprender a realizarse en sociedad de forma sana.

El fondo marino, recreado en el Virgen del Castillo. | Cedida

El fondo marino, recreado en el Virgen del Castillo. | Cedida / B. Blanco García

"Habíamos detectado dificultades en los niños a nivel de relaciones sociales o incluso en la alimentación, por los problemas económicos que estaban arrastrando las familias", reconoce la directora del colegio, Ana Belén Peláez. Por ese motivo, su proyecto se enmarca en una iniciativa que pretende ir más allá de la lectura y convertirse en un plan de mejora del propio centro y sus alumnos. "Hemos ido trabajando cada mes un aspecto diferente, como el estrés y la ansiedad, el cuidado de los mayores, la alimentación y el ejercicio físico, el ahorro energético o el patrimonio. Ahora mismo estamos con el respeto a las demás culturas, desde los saharauis hasta la etnia gitana o de países de niños que están estudiando en el colegio", detalla la directora.

Eva Malillos, directora de La Candelaria. | Ana Burrieza

Eva Malillos, directora de La Candelaria. | Ana Burrieza / B. Blanco García

El proyecto ha dado pie a la creación de una nueva biblioteca en el colegio. "Tenemos muchos libros ya y allí trabajamos con los niños, aparte de las actividades que desarrollamos en el aula y que luego se presentan en la misma biblioteca", detalla.

De esta forma, el libro se convierte en una guía cada mes para trabajar el tema que corresponda. "Se va aprendido de tradiciones, de relaciones sociales y del respeto a los mayores a través de la lectura de estos temas y la verdad es que ya se están notando mejorías. Por ejemplo, la alimentación ya es más sana, dejando a un lado la bollería industrial", asegura sobre uno de los objetivos alcanzados en los meses que lleva en marcha este proyecto, que durará todo el curso.

Dos profesoras observan una de las actividades del proyecto en Nuestra Señora de la Candelaria. | Ana Burrieza

Dos profesoras observan una de las actividades del proyecto en Nuestra Señora de la Candelaria. | Ana Burrieza / B. Blanco García

Con una decoración especialmente llamativa se presenta el colegio Virgen del Castillo, ya que el visitante parece adentrarse en una auténtica selva cuando cruza la puerta del centro. "Misión 2030" es el título de su propuesta, basándose en los Objetivos de Desarrollo Sostenible. "Además del fomento a la lectura, para nosotros también es importante crear un buen ambiente, porque todo lo que reciban a través de los ojos hará que la experiencia sea más agradable", señala la jefa de estudios del colegio, Rebeca Haering.

Un grupo de alumnos busca libros en la biblioteca habilitada dentro del proyecto de fomento a la lectura del colegio Juan XXIII. | Jose Luis Fernández

Un grupo de alumnos busca libros en la biblioteca habilitada dentro del proyecto de fomento a la lectura del colegio Juan XXIII. | Jose Luis Fernández / B. Blanco García

Un niño maya es el protagonista de la aventura, a quien hay que ayudar para conseguir superar todas las pruebas con el objetivo último de salvar el planeta. "En los diferentes espacios, a través del cuento y trabajando los ODS con varias actividades sobre temas como la coeducación o la ecología sostenible, van superando pruebas y consiguiendo recompensas hasta finalizar haciendo un juramento donde se comprometen a cuidar el planeta", resume Haering.

La imaginación, puesta al servicio de las letras

La imaginación, puesta al servicio de las letras / B. Blanco García

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