El Balonmano Zamora Enamora se queda al borde del precipicio tras caer ante UD Ibiza

El BM Zamora Enamora sufrió una dolorosa derrota a manos del UD Ibiza en un choque en el que la mayor calidad ofensiva de los visitantes y un arbitraje con criterio dispar en las acciones clave marcaron la diferencia. Un traspié que deja al equipo de González al borde del descenso a tres jornadas del final,

Tras catorce días sin competir, pues el fin de semana anterior no hubo competición, el BM Zamora Enamora regresaba al Ángel Nieto situado a tres puntos de los puestos de salvación y la obligación de ganar al UD Ibiza para no "perder comba" en la lucha por la permanencia. Un difícil reto pues, en la primera vuelta de la segunda fase, los isleños superaron con claridad al cuadro de Viriato y acudían a Zamora sin haber encajado derrota alguna desde que se inició la pelea por mantener la categoría.

Con su siete de gala y un tanto de Anderson Silva, el BM Zamora abrió el partido tratando de marcar la pauta a seguir. Sin embargo, sus fallos en la finalización le impidieron tomar una renta importante al inicio del choque ante un UD Ibiza que también falló lanzamientos claros, dejando el tanteo en un escueto 2-1 tras los primeros cinco minutos.

Superado ese primer tramo de calentamiento, llegaron los primeros apuros pistacho. Los visitantes encontraron hueco en la esquina derecha de la zaga zamorana y, con un parcial de 0-3, tomaron el mando en el electrónico. Golpe que, sumado al 2-4, llevó a Fran González a pedir tiempo muerto.

Tuvo que ser Anderson Silva, ya con el quinto ibicenco en el marcador, el que acabara con la sequía local y pusiera la primera piedra de la obligada reacción de un BM Zamora Enamora que se aplicaba bien en defensa pero que carecía de puntería en ataque en aquellas veces que superaba el muro planteado por su rival. Circunstancia que motivó los primeros movimientos de banquillo por parte pistacho.

Guille y Bellia pusieron aire fresco a la primera línea y el primer acto alcanzó el partido con un ajustado 4-5. Pero, cuando mejor estaban los locales, Etayo recibió la primera exclusión de la tarde.

Esa inferioridad dio respiro a UD Ibiza, como la siguiente y más discutible aplicada a Cubillas para alargar a cuatro minutos el castigo local. De hecho, fue en esta segunda, cuando a puerta vacía el equipo visitante cimentó su ventaja en el marcador (6-9, m. 20).

Con todo, los "Guerreros de Viriato" no tiraron la toalla. Se mantuvieron en el partido como pudieron, especialmente tras una tercera exclusión incomprensible a los ojos del público. Una acción que no impidió que, con buenas acciones de Guille, Etayo y Andrés, se llegara a los últimos compases con el tanteo igualado. Un equilibrio que se hizo total pese a las desquiciantes decisiones arbitrales tras el sonido de la bocina, con un golpe franco de Jaime que supuso el 11-11 con el que se llegó al paso por vestuarios.

Con mucho brío, el BM Zamora Enamora regresó a pista con una defensa sólida y las ideas claras en ataque. Así, se puso por delante en el marcador y solo el perdonar en algún tiro, volvió a evitar que cobrara más ventaja que un tanto. Renta que un parcial de 0-2 en favor de UD Ibiza, que llevaba el partido a su ritmo gracias a su portero.

El duelo se complicaba pero nadie en bando pistacho se escondía y, con un tanto de Silva y una gran acción de Andrés, el cuadro local volvía a meterse en la pelea (15-15) y dejaba a su rival con un hombre menos. Superioridad que, sin embargo, se fue sin goles.

El cancerbero David García, con tres paradas de gran mérito, frenó en seco la anotación local y dio lugar a un parcial de 0-2 que, pese al tiempo muerto de Fran González, se extendió hasta el 15-18 que imperaba en el paso por el ecuador del segundo acto, justo antes de que Cubillas acabara con la sequía.

El tanto pudo haber impulsado a los "Guerreros de Viriato" pero los colegiados volvieron a cargar contra el bloque local y dejaron en bandeja el triunfo a los visitantes. Dos exclusiones consecutivas a los zamoranos, con un incomprensible agarrón por el cuello a Claudio sin sanción de por medio, permitía al plantel ibicenco irse con cuatro goles a los doce minutos finales de partido.

UD Ibiza tenía el partido bajo su control pero los de Fran González no iban a capitular con todo el Ángel Nieto empujando. Lo de tirar la toalla no va con los zamoranos y, pese a todas las artimañas visitantes por arañar segundos o la falta de equilibrio en el baremo arbitral, se iba a pelear. Un gol de Jaime, cargado de rabia, supuso la declaración en firme del frente de guerra por parte del anfitrión. Sin embargo, de ese tanto al siguiente de Guille, transcurrió demasiado tiempo y solo quedaban ocho minutos para levantar un 18-21 en contra.

Doval, con sus paradas, trató de dar oportunidad a los suyos pero ni Raúl Maide ni Claudio, ni siquiera Bellia, vieron portería y sí un UD Ibiza que llegó con el partido sentenciado a los últimos cinco minutos con el potente Sanz -máximo anotador del encuentro y factor decisivo junto a García- demostrando la diferencia de pólvora entre un ataque y otro. Un factor determinante que dejó sin los dos puntos al Balonmano Zamora Enamora. Un botín que le era necesario para alcanzar una permanencia que se complica, siempre a la espera de marcadores como el del duelo entre Amenabar Zarautz y EON Horneo Alicante hoy.

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