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Un empate inservible pero vital

Zamora y Talavera terminan repartiéndose unos puntos que les valen para muy poco pero que les mantienen vivos

Dieguito marca el gol del empate del Zamora CF. / José Luis Fernández

Dieguito marca el gol del empate del Zamora CF. / José Luis Fernández / Manuel López-Sueiras

Manuel López-Sueiras

Manuel López-Sueiras

El Zamora CF volvió a tropezar y esta vez de forma muy grave porque lo hizo contra un rival directo en la lucha por la permanencia que se mantiene a siete puntos, una distancia que parece ya inalcanzable cuando ya solo quedan nueve jornadas de Liga. Fue un encuentro muy equilibrado en el que tan sólo un contragolpe del Talavera nada más comenzar la segunda parte sirvió para desequilibrar la contienda. Y fue una nueva contra, cuando ya el tiempo había finalizado, que culminó Dieguito la que hizo posible el empate final a un gol que le sirve para muy poco tanto a los rojiblancos como a los toledanos.

Luque remata de cabeza, y los jugadores del Talavera celebran el gol.  / José Luis Fernández

Luque remata de cabeza, y los jugadores del Talavera celebran el gol. / José Luis Fernández / Manuel López-Sueiras

Yago Iglesias apostó por el equipo inicial muy parecido al que le dio la victoria contra el Celta B con Xisco sustituyendo al sancionado Cordero en el puesto de central y Losada como enganche. El equipo comenzó funcionando bien intentando triangular en ataque para buscar huecos en la defensa talaverana. Pero fue el visitante Vicente Romero el primero que buscó portería en un lanzamiento desde lejos que salió muy alto. Reaccionó el Zamora que comenzó a redoblarse en su acoso ante la portería contraria, trenzando bien las combinaciones en ataque pero sin encontrar el remate, el gran pecado de este equipo en lo que va de campaña.

Un empate inservible

Un empate inservible / Manuel López-Sueiras

El Talavera tomó la iniciativa en torno al minuto 20 y pasó a llevar la batuta en el campo zamorano, provocando hasta tres córners casi seguidos que la defensa zamorana solventó sin demasiados problemas porque tampoco parecía ser el remate la mejor virtud del Talavera. El partido se volvió muy aburrido en torno a la media hora de juego porque ninguno de los dos rivales se prestaba a arriesgar lo más mínimo, el encuentro se jugaba en el centro del campo con continuos intercambios de la posesión y sin acercamientos a las porterías. Tuvo que ser Carlos Ramos el que lo intentase desde muy lejos pero le pegó mal al balón que salió muy desviado.

Hasta que Losada decidió acabar con el tedio, robó el balón a la defensa toledana y a punto estuvo de marcar el primer gol rojiblanco, cuando corría ya el minuto 37. El Zamora había despertado porque a continuación era Adri Herrera el que volvía a encontrarse con el balón en el área pequeña pero su remate, rodeado de defensores, también se fue fuera por muy poco. Pero el partido se volvió a enfriar porque Herrera sufrió un golpe en un hombro que le obligó a abandonar el campo ayudado por las asistencias y aplaudido por el público. Yago Iglesias decidió sustituirle por Dieguito pero tuvo que ser ya al comienzo de la segunda mitad porque no hubo tiempo para más.

Tras el descanso, el Talavera salió un poco más decidido a llevar la iniciativa en el juego frente a un Zamora que le esperaba bien colocado atrás. Seguía siendo más de lo mismo, dos equipos obsesionados con la posesión pero sin canales para llegar arriba, y eso que ambos viven en una enorme necesidad cuando cada vez queda menos tiempo de reacción para asegurar la salvación.

Y cuando el Zamora intentó trenzar una buena jugada en ataque en la que casi marcó Luque, llegó la fulgurante contra del Talavera que atacó por la izquierda por medio de Dani Pichín que llegó a la línea de fondo y dio el pase medido para que Toño Calvo rematase a puerta vacía en el segundo palo, estableciendo el 0-1 que dejó helado a un Ruta de la Plata que no podía creérselo.

El Zamora intentó reaccionar con una volea de Dani Espejo que se fue a las nubes y el Talavera comenzó a escenificar cada una de las ocasiones que tenían sus jugadores tirándose al suelo y arañando así algún tiempo al reloj. Dieguito también lo intentó con un toque muy templado que no encontró portería, y tuvo también un segundo intento en un remate de cabeza que atajó el portero Edu Sousa aunque el auxiliar ya había levantado el banderín señalando fuera de juego.

Yago Iglesias decidió darle otro aire a su equipo metiendo en el campo a Kepa y Dani Hernández para conseguir mayor llegada por la izquierda y Víctor Cea puso a Monroy en sustitución de Pichín cuando se superaba ya el minuto 60.

Pero el Zamora no reaccionaba y, como es tradicional, la afición comenzó pronto a protestar a un equipo que no era capaz de llegar porque las prisas comenzaban a atenazarle. Yago Iglesias volvió a tomar decisiones, esta vez con Javi Navas y Jon Rojo que entraron en el campo cuando ya solo faltaban quince minutos del tiempo reglamentado mientras en el Talavera era Forgas el que saltaba al terreno de juego.

Nada cambió y el encuentro se fue muriendo poco a poco en el mismo tono de incapacidad ofensiva zamorana, y pérdidas de tiempo de sus rivales. Todo estaba decidido ya cuando, un rápido contrabolpe zamorano permitió a Dieguito marcar el gol del empate que es un consuelo pero sirve para muy poco.

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