Con la voz quebrada, minutos después de terminar el partido, García Valiente seguía pensando en la quinta derrota consecutiva de su equipo. Un nuevo tropiezo del MMT Seguros que al técnico salmantino y a todo su equipo le generó "mucha, pero mucha tristeza, y gran rabia".

"Estoy muy abatido y creo que el equipo también por perder el partido de hoy", confesó, explicando a continuación: "Cuando sales a la pista y lo das todo, das la cara y te dejas la vida pero no consigues el objetivo la sensación es de máxima tristeza. Más aún si hacemos una valoración general de uno y otro equipo en pista y ves que la diferencia no es la que acaba en el marcador, que el partido ha estado igualado".

El entrenador del cuadro de Viriato afirmó que, pese a todo, está "muy orgulloso de todo el equipo" porque "pese a tener que luchar contra todo en la pista, los muchachos nunca se rinden". "El equipo hace todo lo posible pero no está consiguiendo puntuar. A veces por el rival, a veces por otros factores pero la sensación es de darlo todo y no conseguir nada a cambio y eso pesa", afirmó.

En cuanto a si la falta de acierto pudo ser clave en este envite, García Valiente afirmó que: "Cuando el partido está igualado cada detalle cuenta. Un lanzamiento fuera, una falta en ataque inexistente, un siete metros o una parada rival... y eso es uno, dos, tres goles que luego tienes que remontar. Una diferencia que te obliga a jugar al límite, con muchos nervios y tensión, por lo que en esos momentos se cometen errores que te hunden más". Un razonamiento que le lleva a pensar en "cambiar la forma de entrenar y jugar, buscando que no juguemos tan al límite" para "combinar el ir con el corazón en la mano y un par de narices con jugar con cabeza y tranquilidad".