Con una productiva última jornada para los representantes zamoranos se cerró ayer en el embalse de Trasona una nueva edición del Campeonato de España Sub-23, Júnior y Senior en el que los palistas de los clubes de la capital del Duero consiguieron un total de once medallas. Número que se alcanzó gracias a tres nuevas preseas en la última sesión, la correspondiente a las pruebas de velocidad, y en la que sobresalió un nombre por encima de todos. El de Carlos Garrote.

El palista de ADZ Iberdrola volvió a dejar claro que es uno de los grandes de España en lo que al piragüismo de velocidad se refiere. De hecho, en Trasona ejerció de absoluto rey en esta disciplina al conquistar la prueba individual de los 200 metros y rozar con las yemas de los dedos un segundo oro junto a Rubén Vicente en el K-2.

Garrote no hizo prisioneros en el K-1 200 metros. Una vez más, el zamorano demostró su potencia con una fulgurante salida para después apretar los dientes y no dar tregua a sus rivales. El palista de la ADZ Iberdrola llegó a meta con medio segundo de ventaja, logrando así el primero de sus dos objetivos de la jornada.

Poco después, Garrote buscó repetir hazaña en compañía de Rubén Vicente, quien en la regata individual finalizó quinto, quedándose a 1.4 segundos de su compañero. Un K-2 que partía con muchas garantías de lograr medalla, como así acabó sucediendo. Los dos palistas se aplicaron a fondo y cerca estuvieron de colgarse un nuevo oro antes de regresar a Zamora. Poco más de una décima de segundo dejó a la dupla sin subir a lo más alto del podio, otorgándoles una plata con la que Garrote completó su doblete y mantuvo su reinado en el piragüismo de velocidad.

Pero Zamora no solo contó en esta última jornada con la rey del piragüismo en distancias cortas para sumar metales. Fiel a su cita con el éxito, Laura Pedruelo terminó, junto a Victoria Fraile, el campeonato con medalla. La palista del Piragüismo Duero quizá no fuera la reina de la cita (Raquel Da Costa firmó nueve preseas en Trasona) pero demostró una vez más ser un valor más que fiable. Conquistó el K-1 1.000 metros, su objetivo, y además firmó un "triplete" junto a su compañera Fraile, demostrando que son una pareja de calidad, independientemente de la distancia.

Ayer, Pedruelo y Fraile terminaron sumando su cuarta y tercera medalla -respectivamente- en el K-2 200 metros. Una cita en la que, como Garrote y Vicente, se colgaron la plata pero bien pudieron llevarse el oro, que se quedó a poco más de medio segundo de su alcance.

Aún así, la palista zamorana se mostraba muy contenta pues, aunque no sea su distancia, esta medalla confirma el buen trabajo realizado hasta el momento y su mejoría gracias al esfuerzo. Además, completaba un "triplete" de podios junto a Victoria Fraile que arroja un balance más que positivo de su presencia en Trasona.

Con las dos platas en K-2 y el oro del K-1, los zamoranos cerraron su paso por Trasona con once preseas. Un botín considerable que, incluso, pudo ser mayor de haber tenido algo más de fortuna varios palistas más en una animada última jornada para los clubes de Zamora.

Eva Barrios, otra de las grandes del circuito, finalizó sexta en el K-1 200 metros, a poco menos de un segundo de poder despedir su aventura asturiana con medalla. Un cierre que tampoco pudo alcanzar Miguel López Oterino en el C-1 200 metros, teniendo que conformarse con el bronce que logró en la primera sesión. Un éxito que paladeó María Calvo en C-1 200 júnior, donde fue quinta, apuntando que hay madera de sobra para contar con más medallas en futuros campeonatos.