Cerca de quinientos niños disfrutaron en la ciudad de Zamora de su deporte favorito, el balonmano, ya que la capital del Duero fue ayer el escenario del VII Torneo Interprovincial. Un campeonato en el que ocho de las selecciones provinciales midieron sus fuerzas con partidos tanto al aire libre como en distintos pabellones zamoranos.

La jornada fue un canto a la convivencia y la promoción de este deporte. Parecía que las condiciones climatológicas no respetarían el evento, pues no era el día perfecto para llevar a cabo partidos en pistas exteriores como los que pudieron contemplar aficionados y familiares en las pistas municipales de Puertanueva o La Aldehuela, o para comer a la orilla del río en los Tres Árboles. Aún así, el mal tiempo apenas pudo deslucir la competición, brillantemente organizada por Club Balonmano Zamora y la Delegación Provincial que cuidaron hasta el más mínimo detalle con la ayuda de la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento y todos sus empleados, siempre pendientes de cada pormenor del torneo, como la lesión de un joven jugador de Valladolid.

El meta infantil pucelano tuvo la mala fortuna de fracturarse la nariz, pero fue rápidamente evacuado y operado, recibiendo también el cariño de la Federación al recibir una equipación completa para portero de la selección española.

Un premio que también recibieron los mejores jugadores de cada categoría al término de los partidos en una entrega de trofeos en la que las selecciones provinciales de Valladolid fueron las protagonistas.

Entre los premiados, dos jugadores zamoranos: José Tomás González, como mejor defensor en categoría infantil, y Carolina Silva, mejor jugadora infantil femenina.

En cuanto a los conjuntos vencedores del torneo, los combinados pucelanos fueron los ganadores en tres de las cuatro categorías: infantil masculino, alevín femenino y alevín masculino. Los equipos de Valladolid sólo perdieron en la categoría, la infantil femenina. Categoría cuya gran final fue el último partido del torneo y uno de los que más público atrajo, y es que uno de los finalistas era la selección de Zamora.

Las zamoranas cuajaron un gran torneo pero acabaron cediendo ante el representante leonés en el choque decisivo (18-21) por lo que finalizaron el torneo en la segunda plaza. Un puesto que completó el buen papel de las selecciones zamoranas en este VII Torneo Interprovincial, en el que el resto de combinados locales concluyeron en la tercera posición.

Una competición que acabó por resultar todo un éxito gracias al esfuerzo de cada voluntario, el apoyo institucional y la colaboración desinteresada de algunas empresas como Coca-Cola.