«Catástrofe en Sanabria». Con estas tres palabrasportadas de periódicos y crónicas de emisoras de radio y cadenas de televisiónresumieron la magnitud de una tragedia que, 65 años después, sigue viva en la memoria del pueblo de Ribadelago.

A las 0.24 horas del 9 de enero de 1959, el tiempo se paró en el pequeño pueblo de SanabriaLa presa de Vega de Tera acababa de reventar. En pocos minutos, un torrente de ocho millones de metros cúbicos engulló Ribadelago, provocando la muerte de 144 de sus 532 vecinos.