El Balcón de Sanabria, más cerca del museo del Centro de Interpretación del Císter

El Ayuntamiento de Galende somete a exposición pública el proyecto de adecuación arquitectónica y expositiva del Centro de Interpretación del Císter de San Martín de Castañeda, BIC, una actuación presupuestada en 142.032 euros. El alcalde José Manuel Chimeno Lois precisó que la alcaldía completará la inversión "con una pequeña aportación de 13.000 euros para cubrir los objetivos básicos" en relación a las mejoras interiores. El Ayuntamiento tiene cedido el uso del inmueble, propiedad del Obispado de Astorga.

El proyecto ha sido redactado por los arquitectos Estefanía Herrero García e Ignacio Javier Gil Crespo que han contado con la colaboración para la museografía, el diseño gráfico y la iluminación con Miguel Pintre Jiménez, Elena Valado Ferrá, Rocío Rodríguez Balaguer y Ana González Zangróniz. En la parte de la arquitectura técnica participa Paloma Bel Borja.

El proyecto se centra principalmente en el acondicionamiento del actual centro de interpretación situado en la portería del monasterio, para convertirlo en el centro de interpretación del monasterio de San Martín de Castañeda.

El Monasterio de San Martín de Castañeda, futuro centro de difusión de la obra del Císter

Este espacio presenta algunos problemas arquitectónicos aunque el principal problema radica en la precaria instalación expositiva que existe actualmente, sin un claro argumento didáctico ni orden expositivo, y con objetos totalmente descontextualizados y de origen muy diverso. Esta exposición fue fruto de la necesidad de dar contenido al centro de interpretación tras el traslado de la mayor parte de sus elementos didácticos a la Casa del Parque Natural del Lago de Sanabria en el año 2010.

El contenido museográfico girará en torno a siete áreas temáticas desde la fundación del monasterio mozárabe en San Martín de Castañeda, la expansión del Císter en Europa y España, la muerte y las donaciones a los monasterios, pasando por el agua y los monasterios, la historia y desarrollo del monasterio de San Martín de Castañeda hasta la liturgia y vida monástica. Además habrá un área de monasterios cistercienses en la provincia de Zamora.

Los redactores del proyecto ponen también especial referencia a la figura y la labor científica y de investigación del arqueólogo e historiador del Arte, Manuel Gómez-Moreno, gracias al cual se catalogó e inventarió el monasterio, con su posterior protección patrimonial y recuperación.

La plaza del monasterio de San Martín de Castañeda, a estudio

El centro está formado por dos plantas comunicadas por una escalera situada en su extremo oriental, encajada entre la roca y la bóveda de madera reconstruida, presentando escalones compensados para evitar la cabezada con dicha bóveda. Seis escalones antes del desembarco de la escalera, se abre una salida de emergencia. El acceso al centro de interpretación se realiza por la planta baja mediante un vestíbulo de 38 metros cuadrados, cubierto por un forjado de madera.

El vestíbulo se abre a dos espacios, uno de ellos a la zona oriental con la llamada "sala abovedada", una sala de 57 metros cuadrados cubierta por una bóveda de piedra. Antiguamente se utilizaba como sala de proyecciones y actualmente está ocupada por una exposición del Plan Románico Atlántico. La zona occidental está ocupada por una de las áreas expositivas de 64 metros cuadrados, cubierta por bóvedas de madera. En ella se acumulan sarcófagos, elementos litúrgicos y esculturas de bulto redondo entremezcladas con elementos etnográficos, así como carteles descontextualizados que muestran la restauración de piezas que no están próximas.

El proyecto recoge una mínima intervención arquitectónica sobre el edificio y resuelve algunos condicionantes como mantener los sarcófagos de piedra en la planta baja, ya que su peso y dimensiones es desaconsejable su traslado a la planta superior.

Bajo la escalera actual existe una fuente o manantial, que se incorpora a la exposición para explicar la importancia del agua y las infraestructuras hidráulicas en las fundaciones monásticas.

Las piezas de las se disponen determinan los grupos temáticos y el soporte expositivo como plataformas, vitrinas y paneles. Se trata de piezas muy variadas y muchas veces incompletas o descontextualizadas.

Dado el estado del coro, según los informes consultados por el equipo redactor, no se pueden montar todos los sitiales en su estado original. La reja del coro está incompleta. Falta la viga superior y varios barrotes. Por este motivo se propone exponer sólo los dos primeros cuerpos. En cualquier caso, dadas las dimensiones de la sala, no se podría colocar el último cuerpo de barrotes.

Los problemas a resolver son el desnivel de acceso, instalación eléctrica y de iluminación, habilitar los aseos públicos, y la falta de espacio de almacenaje para el material que queda fuera de la exposición. La actuación aborda la renovación de la señalética obsoleta.

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