Las fiestas de pueblo más solidarias: terminan limpiando la Sierra de la Culebra

La Torre de Aliste, localidad perteneciente al municipio de Mahíde, puso ayer la guinda a las fiestas patronales en honor a Nuestra Señora la Virgen de las Nieves, con una actividad solidaria tan inusual como acertada y digna de alabar: una jornada de voluntariado donde todos los vecinos y emigrantes que así lo desearon pudieron participar en la recogida de basura por los campos, liderados por su propio alcalde pedáneo, Laurentino Peláez Lorenzo.

Puntuales, a la hora pactada, a las 8.30 de la mañana, allí estaban listos los turriones y turrionas de todas las edades, niños, jóvenes y mayores, para celebrar un concejo de vecinos a la antigua usanza donde cada uno puso su prestación personal para contribuir a mejorar la calidad de vida del pueblo, en este caso recogiendo la basura que otros fueron dejando abandonada en los campos. El objetivo es que los desperdicios no causen, aparte de mala imagen, deterioro en su ecosistema y por consiguiente en la biodiversidad de sus mágicos parajes a la vera del río Aliste y de la Sierra de la Culebra.

La abundancia de botes de lata y botellas recogidas demuestra que algunos de los que salen al campo prefieren aligerar peso en su marcha y tirar el contenedor una vez consumido el contenido, cuando no cuesta nada regresar con él y depositarlo en los contenedores de basura para su posterior reciclado por la Mancomunidad de Servicios "Tierras de Aliste", cosa que ayer tuvieron que hacer los animados voluntarios.

Culminada la tarea, los voluntarios, al más puro estilo de los concejos, fueron obsequiados con una convidada a base de los siempre exquisitos hornazos alistanos y empanadas. Los voluntarios de La Torre predicaron con el ejemplo.

Hoy, miércoles, La Torre pondrá el punto y final a sus festejos con una velada gastronómica a base de guiso tradicional de ternera alistana con patatas.

Entre los actos festivos de este año destacó la misa solemne en honor a la Virgen de las Nieves en la iglesia parroquial de San Julián y Santa Basilisa. Es La Torre uno de esos pocos pueblos alistanos donde el patrono del pueblo y de la parroquia no es el mismo.

Si emotiva fue la eucaristía no menos lo fue la procesión con todos los feligreses y feligresas acompañando a su patrona. El folclore de mañana y tarde contó con la actuación de la agrupación alistana Manteos y Monteras que dirige el alcañizano Cristian Román.

El Encuentro de Gaiteros, un evento instaurado en La Torre desde hace muchos años que solía celebrase una vez terminadas las fiestas, este año se adelantó y se incluyó dentro del programa. Gaiteros y tamborileros de diferentes pueblos y comarcas se dieron cita allí para mostrar su habilidades con la gaita y el tamboril. Es una iniciativa donde todo aquel que llegue con su gaita y su tamboril puede mostrar su arte.

En cuanto a las verbenas este año sólo contaron con la actuación de una orquesta, Cayena, de Asturias, además del el DJ Diego Duende y la discoteca Nebulosa. Otro de los grandes éxito fue el pasacalles de la víspera y la degustación de tortillas y embutidos.

Los vecinos de La Torre seguirán trabajando para que sus fiestas patronales recuperen el arraigo de antaño que, como en todos los pueblos, sufrió un duro revés en 2020 y 2021 a causa de la crisis sanitaria.

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