“¡Alcaldes y empresarios de Sayago…!, ¡pastores, agricultores, ganaderos..!. Hubo tiempos mucho peores. Por favor, ¡no os desaniméis…! Seguir trabajando. Y mucho mejor, si lo hacéis cómo lo solían hacer nuestros abuelos. Trabajando unidos, para ser más fuertes. Acaso, algún día, gracias al esfuerzo común, lleguemos a sentirnos todos los sayagueses algo más ricos...”.
Jesús Villar, “Sayagués Ilustre” por acuerdo de la Asociación de Empresarios que organiza el Día de la Comarca, entonó un canto a la esperanza y el optimismo en su discurso de agradecimiento durante el acto celebrado en la Ermita de Gracia. La “casa” de la patrona de Sayago ha vuelto a convertirse en el escenario de una fiesta que quiere representar la exaltación a los valores de esta comarca.
Y han sido dos sayagueses de brillante trayectoria quienes este año han puesto voz al orgullo de ser de esa tierra de frontera y piedra. Jesús Villar y Julio Borrego, sayagueses de Palazuelo y Moralina respectivamente, éste último como pregonero de la fiesta.
“En Sayago nací, en Sayago tengo casa y raíces y a Sayago le he dedicado buena parte de mi vida profesional como lingüista, estudiando esa variedad que emplearon nuestros abuelos, que todavía conserva muchos testimonios y que dista mucho de ser esa jerga de rústicos que le atribuyeron nuestros clásicos” ensalzó el Profesor Emérito de la Universidad de Salamanca (Departamento de Lengua Española) y Premio Castilla y León de las Ciencias Sociales y Humanidades, entre otros méritos que adornan su trayectoria.
Como hombre de lengua y lenguaje, Julio Borrego exaltó el “placer de la conversación ”que se está perdiendo en el mundo moderno. “Y a mí me fastidia especialmente, porque vivo de ella. La parada y las fraguas han desaparecido. Se han acabado en muchos sitios las solanas y los seranos” expresó el profesor ante una ermita de Gracia repleta de sayagueses llegados de todos los rincones de la comarca.
Añoró unos tiempos en los que “no se concebía ir en silencio aunque no conocieras de nada al vecino”. O esa nueva visión de las cosas que refleja el lenguaje. “Solo os diré que cualquier chaval sabe hoy qué es el buzón de voz, el whatsapp (aunque lo llame el “guasa”), una perdida, la cobertura, el Twitter y, por supuesto, el PIN, el PUK y la tarjeta SIM. Pero no saben distinguir entre cerro, cotorro, cotorrico, cabezo, teso, pizarro, sierro, rodillo y manga”.
En palabras de Julio Borrego “no es bueno anclarse con nostalgia en el pasado y desear que vuelva porque en el fondo lo que estamos deseando que vuelvan son nuestros años mozos. Pero también es malo despreciar el pasado como cosa inútil porque de él nace nuestro presente”.
El lingüista de Moralina volvió a recurrir a los versos para pedir a los sayagueses “que las tradiciones no caigan en el olvido”.
Unas palabras que encontraron eco en Jesús Villar, quien de forma insistente hace bandera de la defensa de un museo etnográfico para la comarca de Sayago frente a la al “grito hiriente de los anticuarios recorriendo las calles de nuestros pueblos y cargando en sus camionetas los elementos y aperos que usaron nuestros padres y abuelos. Se van llevando esos enseres y herramientas de trabajo que tanta labor hicieron; que tan necesarias y útiles fueron y que, en mi opinión, deberían de estar visibles pero protegidas en el Museo Etnográfico de Sayago”.
El autor de documentales sobre tradiciones y memoria de Sayago y los sayagueses, el impulsor también del proyecto sayago.com que desde el año 1995 se ha convertido en la gran enciclopedia de saberes y experiencias de esta comarca, volvió a defender “la labor y el trabajo de nuestros antepasados”
Jesús Villar lamentó ante sus paisanos que ninguno de esos proyectos hayan podido evitar el drama de la despoblación. “Hace años que entre residentes y emigrantes éramos muchos en Sayago; las iglesias se llenaban los domingos. En nuestras plazas había niños y bullicio a todas horas. Sin embargo, en estas últimas décadas muchos se fueron y pocos vinieron. Nos falta mucha gente ahora para llenar la iglesia los domingos; nos faltan médicos, curas, maestros… Están cerradas la mayoría de las escuelas y cada vez corren y gritan en nuestras plazas menos niños”.
Villar emplazó a los sayagueses a “incrementar nuestra autoestima, dar a nuestros recursos y productos el valor que tienen que es mucho, y sobre todo, aprender a venderlos para que otros consuman de lo nuestro y también los valoren”.
Las palabras de Julio Borrego y Jesús Villar retumbaban entre los muros de una ermita de Gracia donde también se escuchó al presidente de la Asociación de Empresarios de la Comarca de Sayago. Francisco Rodríguez no dejó pasar esta oportunidad para exponer ante políticos provinciales y alcaldes de la comarca reivindicaciones que ya son históricas.
Mejores comunicaciones, el desarrollo de concentraciones parcelarias, medidas para acabar con los ataques del lobo que están masacrando a los ganaderos.
Los actos del Día de la Comarca de Sayago estuvieron precedidos por la misa celebrada por el sacerdote Florentino Pérez. Destacó también la actuación del músico Luis Pedraza.
