Alcañices ponía en marcha ayer, con carácter oficial, la nueva Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) tras pasar satisfactoriamente el período de pruebas iniciado en diciembre. Se soluciona así una de las grandes y graves asignaturas pendientes: erradicar definitivamente los vertidos incontrolados a la Ribera de Bouzas en el río Angueira.
Atrás quedan doce largos e incongruentes años donde, al estar fuera de servicio la vieja depuradora, las aguas de la red general de saneamiento terminaban directamente y sin tratamiento alguno en el cauce fluvial para desgracia del ecosistema ribereño alcañizano y muy en particular para la primera aldea portuguesa al otro lado de la frontera: Sao Martinho de Angueira.
El pueblo, situado a la vera del río y en un entorno sobre el que gira toda la vida agroganadera, social y de ocio, cuenta con una piscina natural donde en los últimos años las aguas sin depurar de Alcañices no invitaban precisamente al baño: “Más vale tarde que nunca. Españoles y portugueses tenemos que recuperar ahora la ruta de Alcañices a Sao Martinho como el paraíso natural que fue y punto de encuentro social y humano, de convivencia y hermandad” señalan satisfechos los vecinos lusos.
La depuradora antigua, cuyo proyecto técnico fue visado el día 27 de agosto de 1991, no se construiría sin embargo hasta 1995, y su funcionamiento irregular comenzaba allá por 2010, cuando ya se dio por hecho que la única solución viable era una nueva.
La entrega y recepción oficial de la EDAR entre Junta y Ayuntamiento contó con la presencia del consejero de Fomento y Medio Ambiente Juan Carlos Suárez-Quiñones, la delegada de la Junta de Castilla y León en Zamora Clara San Damián, el vicepresidente tercero y diputado de Medio Ambiente Javier Faúndez Domínguez, y el alcalde de Alcañices Jesús Lorenzo Más.
Han pasado cuatro años entre trámites y obras para ver culminada la EDAR cuyo proyecto técnico finalizó el día 26 de diciembre de 2017 el ingeniero de caminos, canales y puertos Javier Prieto Conde, por encargo del Ayuntamiento de Alcañices.
Aunque se construyó en el mismo solar de la antigua, al ser la nueva más grande y necesitarse 1.358 metros cuadrados, el Ayuntamiento de Alcañices hubo de adquirir para ello a un vecino una finca colindante para el pozo de gruesos, pretratamiento, bombeo, contador biológico rotativo, tanques de sedimentación primaria y final (de 120 metros cúbicos cada uno con 14 metros de largo y 3,40 de diámetro), recirculación de fangos y caudalímetro.
La solución elegida para Alcañices ha pasado por una planta de última generación diseñada para poder depurar en casos extremos hasta un caudal de 78.000 litros de agua por hora y se ha dimensionado para poder cubrir las necesidades de una población de hasta 2.200 habitantes equivalentes al menos.
El caudal de diseño y tratamiento en período estable se sitúa en 312 metros cúbicos (13.000 litros por hora) y en período estacional en 423 metros cúbicos (18.000 litros a la hora).
Para el tratamiento biológico se han instalado dos biodiscos Unfamed (contadores biológicos rotativos en tres fases): una tecnología que permite alcanzar unos resultados adecuados a la normativa vigente con un mínimo de coste económico de explotación, a la vez que se adaptan a las fluctuaciones de caudal y a las cargas contaminantes recibidas.
El diseño se hizo sobre un sector de “población estable” de 1.111 personas y año horizonte de 1.478 con diseño para 5.500: “poblacional estacional” de 1.624 y año horizonte de 2018 con un diseño total para 2.200 personas.
La financiación de la nueva infraestructura, cuyo coste ascendió a 882.861 euros, se ha afrontado a tres bandas: Junta de Castilla y León 249.710 (40%), Diputación de Zamora a través del Área de Medio Ambiente 249.710 (40%) y Ayuntamiento de Alcañices 124.855 (20%).
Somacyl (Sociedad Pública de Infraestructuras y del Medio Ambiente de Castilla y León) contrató en su día las obras a la empresa “Gecocsa” de Salamanca, que presentó la mejor oferta económica (753.612,99 euros) estableciéndose un plazo de ejecución de 16 meses.
El plazo de garantía será de 12 meses (hasta el 14 de marzo de 2023). Luego Somacyl asumirá la explotación, la conservación y el mantenimiento por un período de 25 años (en concreto hasta el 14 de marzo de enero de 2047).
Las aguas de la red de saneamiento pasan un primer tratamiento donde se eliminan los elementos gruesos, posteriormente pasa a los tanques de decantación y finalmente se actúa con un tratamiento secundario que reduce drásticamente la carga contaminante, completándose con una segunda decantación y el tratamiento de los fangos.
Según los cálculos técnicos la retirada de los fangos producidos habrá de realizarse aproximadamente cada 60 días a razón de una media de 125 metros cúbicos de lodos operando a carga máxima en temporada alta (verano) y con menos frecuencia durante la temporada baja: otoño, invierno y primavera.
Jesús María Lorenzo Más, alcalde de Alcañices aseveraba que “Erradicamos uno de los mayores problemas que teníamos en el municipio. Tenemos en la ribera de Bouzas un entorno natural y paradisiaco que a partir de ahora podrá ya utilizarse por los vecinos de Alcañices y Sao Martinho sin los problemas. Trabajaremos para que el río Angueira vuelva a ser punto de encuentro y disfrute como lo era antaño tanto para los españoles como para los portugueses”.
El 9 de octubre de 2020 se firmó el “Protocolo General de Actuación entre la Junta de Castilla y León y la Diputación de Zamora para promover el establecimiento de sistemas de depuración de aguas residuales urbanas en núcleos con población de entre 500 y 2.000 habitantes.
El programa, en fase de desarrollo técnico, incluye 340 depuradoras en toda la región. DE ellas, en Zamora, están acabadas y funcionando, las de Alcañices (dentro de la Reserva de la Biosfera Tansfronteriza “Meseta Ibérica” de España y Portugal) y Villamor de los Escuderos, y en ejecución la de Castrogonzalo.
