Las obras en la iglesia de Entrala obligan a trasladar las misas al salón municipal

Los feligreses pertenecientes a la parroquia de Entrala tendrán que acudir a partir de ahora al salón del Ayuntamiento de la localidad para asistir a las misas dominicales. Las obras de mejora que han arrancado esta semana en la iglesia obligan a realizar un traslado temporal de la actividad religiosa y litúrgica durante los seis meses de duración prevista de los trabajos.

El proyecto de rehabilitación incluye un arreglo del tejado, deteriorado no solo por el paso del tiempo, sino por el desplome de un nido de cigüeña de grandes dimensiones (pueden llegar a pesar una tonelada), que ha originado daños adicionales. Además, se realizarán trabajos para garantizar la sujeción de la torre del campanario, cuyo mal estado hacía temer posibles desprendimientos. Las obras, que han obligado a trasladar todos los enseres de la iglesia a locales disponibles, también incluyen la intervención en la cubierta interior del templo para comprobar y, en caso necesario, reponer la techumbre de madera existente.

La financiación de las obras será compartida entre el Obispado de Zamora, la propia parroquia mediante los donativos y donaciones recibidas y la Diputación de Zamora, que también cofinancia parte de los gastos.

La caída del nido de la cigüeña también se han convertido en un quebradero de cabeza en la iglesia de Tardobispo, donde está previsto intervenir para retirar los restos y realizar los correspondientes arreglos, ya que un tejadillo próximo al campanario también ha resultado dañado. Con el mismo problema se encuentra la ermita del Cristo de Morales, también perteneciente a la Unidad de Acción Pastoral de Morales del Vino, que integra a Entrala, Tardobispo, Cazurra, El Perdigón, Pontejos, San Marcial y al propio municipio moralino. En este pequeño templo se encuentra previsto solicitar un permiso para retirar el nido de cigüeña en los plazos previstos ante los desperfectos generados por el mismo.