El delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, puso de relieve hoy en San Vitero (Zamora) la importancia del trabajo que desarrolla la Asociación Nacional de Criadores de la Raza Asnal Zamorano-Leonesa (ASZAL), que ha adoptado el lema ´¡Ponga un burro en su vida!´, en referencia a un nuevo modo de entender la existencia de este animal. "Es muy importante lo que han hecho por la mejora de la genética. Estamos viendo aquí animales extraordinarios y lo importante ahora es buscar lugares para estar estos burros y para que exista la potenciación y la comercialización de la raza", comentó.

Alejo, quien pidió "un esfuerzo importante entre todos para el desarrollo rural y de las razas autóctonas y del trabajo de hombres y mujeres de muchos pueblos que siguen luchando por la raza asnal zamorana-leonesa con el apoyo de la asociación de criadores y otras instituciones", pronunció estas palabras mientras visitaba la duodécima Exposición Monográfica de la raza asnal zamorana-leonesa, celebrada hoy en la población alistana de San Vitero.

En este contexto, el delegado protagonizó la anécdota de la lluviosa jornada al adquirir dos burros zamorano-leoneses para llevarlos a la finca que posee en su localidad natal, Almeida de Sayago, donde ya tiene otros ejemplares. "Como lo mejor es predicar con el ejemplo, después de la subasta y con el asesoramiento de la asociación, a la que pertenezco, voy a adquirir dos burros", anunció en declaraciones a los periodistas. "Ya he ojeado algunos y después de la subasta cerraremos el trato para incorporar a Almeida de Sayago dos burros zamorano-leoneses", agregó. Miguel Alejo destacó que los burros de raza zamorana-leonesa "son muy afectuosos, muy cariñosos y extraordinarios como animales de compañía".

Futuro

En este mismo sentido se manifestó el alcalde de San Vitero, José Tola, quien dijo que "aunque el peligro de extinción de esta raza está superado, en realidad, quienes mantienen estos animales son gente con cierta edad". Por esta razón, recordó que las perspectivas de conservación del burro zamorano-leonés pasan por otorgarles nuevos usos, al margen de las tareas que desempeñaron tradicionalmente en el ámbito agrario.

"Las perspectivas que vemos es que se puede ir adaptando a otros usos porque hay gente joven interesada en coger animales. Lo único es que hay que entender que son animales que no pueden estar en un piso; los tiene que tener gente que viva en la zona rural o que tenga una parcela donde tenerlos", señaló. "Es una animal de compañía pero de campo", puntualizó.

La principal preocupación de los responsables de ASZAL es "seguir encontrando ganaderos aunque, afortunadamente, están apareciendo ganaderos para esta raza", según resaltó José Emilio Yanes, veterinario y colaborador de la Asociación. "Preocupaciones teníamos antes muchas por los problemas reproductivos y de genética que existían pero eso ha sido mejorado suficientemente y ahora mismo hay una garantía de buena genética", añadió.

No obstante, comentó que "siempre que aparezcan ganaderos nuevos, el futuro está garantizado y parece que esto está animado y que no va haber problema, en principio". La Asociación Nacional de Criadores de la Raza Asnal Zamorano-Leonesa, constituida por unos 550 socios, el 80 por ciento de ellos de la provincia de Zamora, contabiliza en la actualidad 1.150 cabezas, "repartidas entre burras adultas, mayoritariamente, burras de recría y los buches que nacen", según precisó Yanes.

Cita tradicional

Además de la muestra de más de medio centenar de ejemplares y el Concurso Nacional de la raza, la feria incluyó como novedad en esta edición la presentación de una docena de líneas genéticas de machos y la exposición de ejemplares de la raza mirandesa, procedente de Miranda do Douro (Portugal) y parecida a la zamorana-leonesa.

La jornada se cerró con la tradicional Subasta de Buches de alto valor genético, seleccionados por la comisión de valoración del libro genealógico de la raza conforme a su ascendencia genética y sus características morfológicas. En esta ocasión, se subastaron doce animales: cuatro machos, cuyo precio de salida fue de 300 euros, y ocho hembras, que salieron a subasta a 1.000 euros.

El presidente de la Diputación de Zamora, Fernando Martínez, recordó que esta feria es "un apoyo a la raza zamorana-leonesa, que es patrimonio de todos los zamoranos".

"No podemos olvidar que esta raza estaba en peligro de extinción y así fue declarada en 1997 y, desde esa fecha, la Diputación puso en marcha no sólo ayudas a las personas del medio rural, fundamentalmente, que quisieran poner en valor y mejorar la raza y conservarla", comentó.

Al respecto, añadió que la institución provincial también creó un núcleo de conservación y mejora de la raza en La Aldehuela, que próximamente se trasladará a la localidad de Madridanos. "Desde entonces, hemos venido colaborando con el Ayuntamiento de San Vitero en la organización de esta feria".

Martínez subrayó que "la idea es seguir apostando, mejorar y mejorar el propio recinto ferial" y recordó que existe un compromiso de la Diputación de Zamora con el Ayuntamiento de San Vitero en este sentido. "El proyecto ya está finalizado y la idea es que en la próxima junta de gobierno de la institución provincial salga a licitación la reforma y ampliación del actual recinto ferial por un importe de más de 400.000 euros, financiados en un 70 por ciento por la Diputación y en el 30 por ciento restante por el Consistorio", anunció el presidente de la institución provincial.