La Confederación multa con 18.200 euros a Castrogonzalo por vertidos no autorizados

La Comisaría de Aguas de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ha multado con 18.200 euros al Ayuntamiento de Castrogonzalo por vertidos no autorizados al río Esla que se produjeron en el año 2022, apenas tres meses antes de que la estación depuradora de aguas residuales se pusiera en funcionamiento en la localidad.

Se trata de dos multas diferentes. La primera, por una cuantía de 16.900 euros que abarca el periodo de enero a junio de ese año. La segunda, de 1.300 euros, va desde junio hasta mediados de julio. La liquidación de ambas sanciones ha llegado al Ayuntamiento dos años después de las infracciones, según confirmó ayer el alcalde, Gonzalo García.

La estación depuradora de aguas residuales comenzó a funcionar el 1 de octubre de aquel año. La EDAR comenzó a depurar a partir de ese momento las aguas sucias del núcleo poblacional y de la zona industrial, a excepción de las dos fábricas lácteas de la zona.

En aquel momento las queserías ya estaban desconectadas de la red de saneamiento local para contar con estaciones de depuración propias y ajenas a la municipal, además de una red de colectores individuales. Proláctea fue la primera en completar los trabajos de la infraestructura necesaria para depurar las aguas, y hace tiempo que cumple con esta obligación. García confirmó ayer que Lácteas Cobreros cuenta ya con los permisos medioambientales para iniciar las obras de su depuradora y la red de saneamiento necesaria.

Un mes después de la puesta en funcionamiento de la EDAR de la localidad, la Fiscalía Provincial abrió diligencias contra la empresa a partir de una denuncia del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) por un vertido no autorizado que había sido documentado por vecinos con fotografías y vídeos. El Ayuntamiento abrió un expediente sancionador.

La normativa obligaba con anterioridad a las empresas lácteas a tener sus propias depuradoras, sus redes individuales de saneamiento, y un emisario para conducir el agua depurada al río Esla.

Hasta que la depuradora de Castrogonzalo entró en funcionamiento los vertidos industriales le costaban a la localidad 34.000 euros de canon anual a la Confederación Hidrográfica del Duero sin contar las multas por vertidos no autorizados. El canon con la nueva depuradora funcionando es desde 2022 de 1.243 euros al año.

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