Síguenos en redes sociales:

Emiliano Pérez Mencía, investigador: «Queda poca gente en los pueblos de Los Valles, son todos mayores»

«Más de una treintena de personas mantienen antiguos oficios muy raros de encontrar en otros sitios como alambrero, tripero, guarnicionero y hojalatero»

-¿Como miembro fundador del Centro de Estudios Benaventanos Ledo del Pozo hace unos años que lleva a cabo una labor investigadora?

-Durante estos años, desde el 89-90, me he dedicado más bien a labores de organización y administración en el CEB, aunque sí que he elaborado los repertorios bibliográficos sobre la comarca, donde está recopilada toda la biografía que hace referencia no sólo a Benavente, sino a todos los pueblos, y también he hecho un estudio de los orígenes de Brigecio, sobre las distintas ubicaciones que se le daban y que finalmente parece que se apuesta por la Dehesa de Morales como ubicación correcta.

-Pero últimamente su trabajo ha derivado más hacia la etnografía.

-Sí, comencé con estudios sobre las tradiciones de mi pueblo, donde hay una cofradía de pastores muy importante y se conservan danzas, gastronomía, luego he seguido las fiestas populares y los museos etnográficos.

-Esta labor ha derivado en una primera publicación, después de las dedicadas a su pueblo natal, sobre la comarca de Benavente con el título "El agua que nos rodea".

-Sí, esta deriva a raíz de las publicaciones en un semanario.

-¿Cree que la vida de Benavente y los Valles está marcada por sus ríos y arroyos?

-Desde luego, es que todo es agua, tenemos cinco ríos y tres arroyos y otros subarroyos, como el Zamarrilla, en Pueblica de Valverde, además de canales, acequias, todo es agua en esta comarca y caminos, hoy autovías.

-Para este trabajo ha recorrido toda la comarca, ¿qué es lo que ha encontrado de particular?

-Me ha llamado la atención la gente, poca y muy mayor, con una falta de atención total, por eso creo que es necesario un hospital y otros servicios.

-¿Ha encontrado que la gente de estos pueblos valora lo que tiene?

-Hasta ahora no mucho,hay una falta de información considerable, pero creo que empiezan a valorar lo que tienen. De hecho, este es el objetivo de este libro, que la gente de los propios pueblos conozca lo que tiene y conserve sus valores patrimoniales.

-¿Esta comarca tiene elementos que son distintivos, tanto en arquitectura, como en costumbres o patrimonio?

-Hay cosas peculiares de la zona, en especial en Vidriales, donde hay paneras muy curiosas, molinos, chimeneas, espadañas de las iglesias, ermitas y artesonados, a los que también dedicaré un estudio. Vamos recopilando cosas con la intención de crear la inquietud para que otros estudien e investiguen.

-Es usted también un investigador de antiguos oficios.

-Sí, tengo recopilada documentación sobre veinte o treinta oficios que arrancan en las familias a finales del XIX o principios del XX y se mantienen. Empecé con los boteros de Benavente y he seguido con otros muchos. Recojo sus nombres, sus datos sobre el oficio, herramientas muy particulares y además de los textos se acompañan de fotografías.

-Seguro que ha encontrado muchas cosas curiosas.

-Sí, por ejemplo, Junquera de Tera ha sido un pueblo alfarero donde llegó a haber cincuenta talleres de alfarería, todos se fueron marchando y quedan dos alfareros, justo lo contrario de lo que ha pasado en Jiménez de Jamuz, donde hasta han hecho un aula del barro.

-¿Otros oficios antiguos?

-El carbonero de Pozuelo de Vidriales, los triperos de Benavente, el herrero de Tardemezar, el hojalatero de Benavente, el alambrero de Castrogonzalo.

-¿Y mujeres?

-Muy pocas, aunque todas ellas son ayudantes de sus maridos en el oficio que éstos realizan, eso es lo que he encontrado en esta investigación.

Pulsa para ver más contenido para ti