En Luz y Vida no hay tregua, ni siquiera el Sábado de Pasión, día del desfile anual. Con la crisis interna en su punto más agudo, la familia del escultor Hipólito Pérez Calvo „autor de la imagen titular de la cofradía„ ha pedido «a todos los hermanos que este año no salgáis acompañando o portando a Jesús, Luz y Vida». La declaración llega después de que los allegados del artista ganaran el juicio a la hermandad por la modificación de las andas, un fallo recurrido por la directiva en el último momento, que posibilita desfilar esta noche con la estructura nueva.

La afirmación, parte de un durísimo comunicado que llega el Sábado de Pasión, llega «con todo nuestro dolor», afirman Arturo y Álvaro Pérez Mulas, hijos del escultor zamorano. La familia del artista asevera que «los actuales dirigentes de la cofradía han agraviado el honor de una de las personas que se deberían homenajear: Hipólito Pérez Calvo», haciendo referencia al reconocimiento a los fallecidos que figuraba en el espíritu fundacional del colectivo. «Han esperado a que falleciese para modificar ilícitamente el paso titular de la cofradía que él creó con auténtica devoción». Los hermanos Pérez Mulas se preguntan: «¿Cómo se puede homenajear a los fallecidos agraviando el honor del autor de aquello que se utiliza para hacer ese supuesto homenaje?».

Asimismo, la familia del escultor pide a los hermanos de Luz y Vida «que bajéis al cementerio a homenajear a todos los hermanos fallecidos, sean de cualquier cofradía, sin ofender de nuevo, por tercer año, la memoria de nuestro padre sacando de nuevo un paso que él no concibió y otros creen que pueden cambiar sin permiso».

En efecto, la directiva de Luz y Vida ha optado por recurrir el fallo desfavorable del juzgado a principios del mes de marzo, lo que les abría la posibilidad de utilizar las andas modificadas hasta la resolución definitiva. En esencia, la estructura que se utiliza es menor „también se reduce considerablemente el número de cargadores„ y cambia la fisonomía del paso, según afirma el juez, dado que los cofrades dejan de «arropar» el Jesús concebido por Pérez Calvo.

Mientras tanto, Jesús de la Concepción defiende que «las andas que han salido desde 1989 hasta 2004 se cargaban a dos hombros y son idénticas a las de este año, con la única diferencia de las faldillas que se han añadido». De la Concepción sostiene que «la imagen no se ha modificado y es propiedad de la hermandad». El presidente asevera que Hipólito Pérez Calvo «solo diseñó las de 1989». En cuanto al fallo judicial, el actual responsable precisa que «la sentencia tiene la posibilidad de ser recurrida», una decisión llevada a cabo porque «consideramos que tenía muchas lagunas y, durante el juicio, fuimos capaces de demostrar muchas más cosas que las que ellos, quienes contaron solo con un testigo».

Con respecto a los herederos de Hipólito Pérez Calvo, De la Concepción alega que «no tienen la propiedad ni en la imagen ni en las andas, dado que la propiedad reside en la hermandad» después de «pagar al escultor hasta el último céntimo». La reacción de los hermanos Pérez Mulas es concebida por la directiva como «un intento de que la hermandad no desfile porque hay unos señores que no reconocen que abandonaron la imagen en 2013 y no fueron a sacar las andas».

Asimismo, el actual presidente explica que «don Emilio Ufano (antiguo presidente de la hermandad) descontó 600.000 pesetas de la época a Hipólito Pérez en una asamblea celebrada en los noventa porque las andas hubo que tirarlas "por inservibles, malas y ferrujuñosas"».

De la Concepción alega «una maniobra» porque «unas personas incumplieron los estatutos en 2013»

La petición de la familia Pérez Calvo incide en la crisis interna de Luz y Vida, motivada por la expulsión de 56 cargadores cuyos expedientes „los afectados niegan que existan los documentos„ han sido recurridos por 41 personas, sin ningún tipo de respuesta por parte del Obispado. La autoridad eclesiástica ha demorado la solución del caso, ampliando el mandato del presidente Jesús de la Concepción hasta el próximo 31 de octubre mientras llega la decisión del juez eclesiástico. De otro lado, un decreto del Episcopado habilita a la plantilla actual a llevar el paso esta noche, una opción que prohíbe a los cargadores sobre los que pesa el supuesto expediente de expulsión.

A estas circunstancias se ha unido el número creciente de hermanos descontentos, convocados por los excargadores una semana atrás a una reunión en un salón del hotel Horus para explicar «0lo que sucede» en Luz y Vida, encuentro que contó con un centenar de miembros. Como resultado, hermanos fundadores, de carga y de fila optaron por promover una «recogida de firmas para celebrar una asamblea extraordinaria y forzar la dimisión de la directiva».