Ganaderos de El Maderal y Guarrate amanecieron ayer con la desagradable sorpresa de sendos ataques de lobo en sus explotaciones de ovino (nueve ovejas y cuatro corderos muertos) y vacuno (un ternero de 20 días) respectivamente.

«Nos toman por idiotas; hoy he sido yo pero mañana otro y dentro de unos días el siguiente». Juan Manuel Martín, ganadero de El Maderal, no alberga ninguna esperanza en que se solucione el problema de los ataques al ganado ni confía en que los políticos tomen medidas «en favor de los hombres del campo». Indignado, unas horas después de que «más de un lobo» le haya matado nueve ovejas y cuatro corderos, Juan Manuel Martín no duda en cargar las tintas contra los representantes políticos «que no nos hacen ni caso; llevamos años denunciando estos perjuicios gravísimos para nuestras explotaciones y miran para otro lado. Quieren acabar con el medio rural, sino no tiene otra explicación».

No es la primera vez que padece un ataque del depredador pero no con las consecuencias del ocurrido en la madrugada de ayer cuando, sobre las 6.30 horas, un hermano de Juan Manuel que se dirigía a ordeñar, se encontró con el desaguisado. «Gracias a que llegó, la avería no ha sido más grande porque tiene toda la pinta de que acababan de estar allí».

El «nuevo ataque de lobos», según ha denunciado la Alianza Upa-Coag, ha ocasionado la baja de nueve ovejas, además de alguna mordida, y cuatro corderos. Los animales se encontraban protegidos por una tenada en una nave ganadera situada a un kilómetro escaso de El Maderal. Según la denuncia del ganadero, los daños «no se limitan a las muertas, sino que serán superiores debido a los abortos y mermas de producción y agravado además por ser la época de pariciones».

Desde la Alianza por la Unidad del Campo se solicita al Servicio Territorial de Medio Ambiente «un control riguroso de estos ejemplares, que han llegado a asentarse en la zona con poblaciones estables y a los que muchos días se les ha visto campar por el término municipal de El Maderal, sin que parezcan tener el más mínimo temor». El propio Juan Manuel Martín asegura haber visto a una loba «muy cerca de las alamedas»; por eso y por las huellas dejadas en el ganado no duda en afirmar que el ataque ha sido de lobos. «No saben el daño que nos hacen; con todo el dinero y el tiempo que cuesta preparar el ganado y que lo perdamos de esta manera. No hay derecho» se lamenta el ganadero.

Parecida es la reacción del representante de la ganadería de vacas de campo Hernasa, de Guarrate, quien asegura que el lobo está asentado en la zona. En su caso el depredador prácticamente devoró un ternero «de apenas quince o veinte días» que se encontraba en una pradera donde pastan alrededor de 160 vacas. «Dicen que por encima del pueblo ha criado una loba en un maizal», asegura Francisco Hernández.

El ganadero de El Maderal carga contra los políticos, a los que «solo les importamos quince días antes de las elecciones».