Una vida de horror en León que terminó en Zamora

Quiruelas de Vidriales fue apenas 7 días el lugar de residencia de la adolescente de 16 años que estuvo desaparecida durante cuatro, en los que sufrió violencia de género y violaciones, de las que nacerían un niño que ahora tiene tres años y un bebéde seis meses, según la denuncia que investiga la Guardia Civil.

Una denuncia que se registró en Zamora, donde se localizó a la menor de edad, a su pareja y a su cuñado, los dos jóvenes que supuestamente la retuvieron desde que tenía 12 años de edad. Fue también el juzgado de Guardia el que decidió enviar a la pareja de la víctima a prisión provisional, arrestada unos días después de que los agentes decidieran establecer un operativo de vigilancia en la casa de Quiruelas en la que se acababan de asentar. Y es que no conseguían localizar a la víctima y sus hijos, ni a los dos varones que supuestamente la retenían. La Guardia Civil de Zamora pudo hallarlos cuando trataban de fugarse por un descampado que rodeaba la vivienda alquilada, de la que escaparon por una ventana para evitar ser vistos por los agentes, que se percataron de la huida y les pudieron alcanzar. Los niños, sin ropa de abrigo adecuadas para las bajas temperaturas de invierno, estaban amoratados cuando la Guardia Civil les dio alcance y trasladó de inmediato a los pequeños y a la madre al Hospital Comarcal de Benavente. El Juzgado de Benavente llevó a cabo las medidas urgentes ante un caso tan grave, como la toma de declaración de la menor y de los dos jóvenes detenidos y decretó el ingreso en prisión del padre de los niños. La juez de Benavente remitió el caso a León, que se ha declarado incompetente, por lo que seguramente tendrá que ser el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León el órgano que decida quién llevará la investigación judicial.

En libertad con cargos

La Audiencia de Zamora ha dejado en libertad con cargos al joven en días pasados, al no estar claro que la menor estuviera retenida, ya que, al parecer, “podía salir de casa, no estaba encerrada, si bien será preciso investigar el nivel de coacción que sufrió en esos años”, explican fuentes judiciales.

La víctima que, al parecer no tiene una buena relación con su madre, no trabajó durante el tiempo que permaneció bajo el control de quien está acusado de haberla agredido sexualmente durante esos cuatro años y de haberla sometido a una situación de violencia de género habitual.

El hermano de su pareja quedó en libertad el mismo día de la declaración al no haber pruebas de maltrato ni de detención ilegal. Una llamada del servicio 1 1 2 denunció el estado de la menor y los dos hijos de corta edad que tenía a su cargo, y dio origen a la intervención policial.

Situación de riesgo

La voz de alarma la dio una médico después de que la adolescente acudiera a una consulta, lo que permitió a la facultativa constatar la situación de riesgo en la que vivían tanto la madre adolescente como los do pequeños. La intervención policial fue inmediata.