Castilla y León es la primera comunidad autónoma española en producción de energía renovable. La región genera, de hecho, el 22% de su energía de forma limpia. Y aunque si bien la mayoría se destina a los sectores industriales y agrícolas, el residencial, conocido como autoconsumo, va ganando poco a poco terreno.

Así se desprende al menos de un estudio llevado a cabo por la compañía SotySolar, que indica que la región se sitúa como una de las principales comunidades que apuestan por el autoconsumo. Con una media de 2.579 horas de sol al año, una instalación de autoconsumo residencial se rentabiliza en 6,28 años, mientras que la inversión media rondaría los 7.326 euros.

Zamora es según este informe la segunda provincia de la comunidad donde más se tarda en amortizar esta inversión, con un total de 7 años, tan solo superada por Burgos, con 7,2 años. De hecho, la provincia se sitúa a la cola de España en cuanto a rentabilidad, donde ocupa el puesto 37.

El ranking regional lo encabezan Palencia y Ávila, provincias donde se requiere una menor inversión, con 5.980 euros, un 18% menos que la media de la comunidad. Salamanca, por su parte, es la que mayor desembolso requiere, con una media de 8.970 euros, aunque desde el estudio apuntan a que son datos que pueden variar en función de la calidad de los equipos.

"Cada vez más familias, comunidades y empresas de Castilla y León se están informando sobre el autoconsumo voltaico, debido a que no solo supone un ahorro económico y revaloriza la vivienda, te mantiene al margen de las subidas de las eléctricas y contribuye a crear un mundo más sostenible", según asegura Edgar Imaz, cofundador de esta empresa.

Tanto es así, que hace tan solo unos días, una compañía ubicada en Roales de Pan anunció que instalará un total de 10.890 paneles y una potencia pico de 1.306,8 kilovatios (KW) en su fábrica, lo que la convertirá en la de mayor tamaño de las existentes hasta ahora en todo el país para autoconsumo industrial.