Una juez ha impuesto una multa de 3.600 euros a dos acusados de un delito de imprudencia menos grave por la muerte de un ciclista natural de Zamora y jefe de servicio de Obras del Ayuntamiento de Salamanca, en un camino rural de Valderredible (Cantabria) en julio de 2015, además del pago de una indemnización de más de 240.000 euros a la hija y los padres de la víctima.

La sentencia, recurrible, a la que ha tenido acceso Efe, establece que de la indemnización deberán responder los condenados y, en su defecto, la sociedad agraria para la que trabajan estas personas y a instancias de la cual colocaron el pastor eléctrico con el que se topó el ciclista y que causó su caída y su muerte, en julio de 2015. El seguro abonará hasta 167.000 euros.

El hombre murió debido a un fuerte impacto contra el suelo al caer forzado por frenar, ya que se encontró un alambre de pastor eléctrico que cruzaba la senda por la que circulaba en Arenillas de Ebro. Sufrió un traumatismo craneofacial y fracturas vertebrales que le causaron la muerte.