Javier Gutiérrez Rico, Nuria Rodríguez Castaño, Fabriciano Miguel Martín, Ana Isabel Molina García, Jorge Sedano Pérez y María del Mar Brime Turiel son los seis zamoranos que recibirán el próximo sábado 16 de junio en el salón de actos de las Cortes Regionales en Valladolid los premios Castilla y León por la vida, que organiza la Federación de Donantes de Sangre de Castilla y León.

Además, indicaron el presidente y el secretario de la Federación, Jesús Murias y José María Álvarez, a su vez y respectivamente presidente y tesorero de la Hermandad de Zamora, 132 grandes donantes recibirán un reconocimiento, aunque solo 92, uno de ellos de la provincia, asistirán a la ceremonia. No habrá representación de Palencia, cuya hermandad se ha salido de la Federación ni de León "porque no les ha dado la gana". Murias será precisamente en su calidad de presidente regional, quien dará la bienvenida a los asistentes, entre ellos el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez y representantes tanto de las Cortes como de los grupos políticos, aunque el responsable de las hermandades afeó la ausencia de éstos últimos, excepto el representante del PP, en anteriores ocasiones: "Deben estar muy ocupados o descansando del intenso trabajo de la semana".

Murias presentó los actos regionales como motivo del Día Mundial del Donante, que en Zamora contarán con una colecta especial, el jueves día 14, de 17.00 a 20.00 horas en el Seminario San Atilano, además de la colocación de una pancarta en La Marina, una gota de sangre y la iluminación especial de la iglesia de Santiago El Burgo.

En todas las provincias de la región se llevarán a cabo iniciativas similares, en algunos casos con un autobús del Centro de Hemoterapia.

En lo que va de año las donaciones de sangre han aumentado en Zamora un 1,90%, si bien la cifra de nuevos donantes ha decrecido un 0,48% con respecto al mismo periodo del pasado año. Mantenerse en unos niveles parecidos a los del año pasado sería ya un éxito, debido a que la sociedad zamorana está envejecida y son muchos los donantes activos que dejan de hacerlo por cuestión de edad, al llegar a los 65 años. "Si el médico lo permite, se puede seguir donando hasta los 70 años".

Murias pidió a la sociedad y sobre todo las instituciones un mayor reconocimiento de la labor altruista que desarrollan los donantes, fundamental para poder realizar intervenciones quirúrgicas y tratamientos de todo tipo, como por ejemplo los oncológicos de los que se beneficia toda la sociedad.