Del propio monte procedían también los trofeos que se encontró la Guardia Civil en el registro efectuado en las propiedades de los tres imputados en la trama de Asturianos, de la muda propia de los animales. "Las cornamentas las tiran los ciervos y los corzos", declaró P.O.C, uno de los imputados. Los guardias civiles que testificaron no negaron que "alguno pudiera" tener ese origen, pero recordaron que "suelen estar deteriorados y no tienen carne" adherida, como ocurre en el caso de la mayoría de los requisados en el registro. La acusación vendría avalada por el propio testimonio del joven gandero al amigo que testificó ayer, al que ofreció detalles sobre cómo preparaba los trofeos, metiéndolos en agua oxigenada, para poder venderlos después.