La ministra de Fomento, Ana Pastor aseguró ayer al presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, que los presupuestos del Estado de 2015 "no solamente van a mantener el ritmo inversor en las infraestructuras viarias y ferroviarias, sino que se van a incrementar". Era el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván el encargado de informar sobre el encuentro de trabajo en el que también participó él mismo, además del secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda.

Silván se deshizo en elogios a la sensibilidad de la ministra zamorana y el Gobierno en general hacia Castilla y León, muy de agradecer "y reconocer en unos momentos de escenarios presupuestarios complicados".

Para 2015 la ministra y su segundo de a bordo refrendaron que el AVE llegará a Zamora y que la autovía entre Benavente y la capital estará en servicio. El incremento presupuestario, eso sí, puede venir muy bien para seguir impulsado el AVE desde la capital hacia el norte, hacia Galicia, la infraestructura que más posibilidades tiene de seguir recibiendo dinero, ya que la autovía entre Zamora y la frontera portuguesa tendrá que esperar, entre otras cosas porque la prioridad de la A-11 se sitúa de momento en el tramo soriano y el desbloqueo del paso por la zona de los viñedos en Valladolid.

Respecto a los ferrocarriles Silván habló de 2015 como "año histórico" ya que el AVE, que llega a Valladolid y Segovia, aumentará su radio de acción a las ciudades de León, Palencia, Burgos y por supuesto Zamora, y además Salamanca tendrá electrificada la línea convencional hasta Medina, donde ya se puede circular en alta velocidad. Respecto a las autovías, estará en servicio la Zamora-Benavente. La autovía del Duero, la A-11 tendrá partidas presupuestarias "en todos los tramos entre Soria y Aranda de Duero (Burgos), materialmente ejecutables en el año 2015" y también dinero para el proyecto de la zona de los viñedos, entre Quintanilla de Onésimo y y Tudela. En ese año también Soria capital quedará conectada a la red de alta capacidad porque "se va a poner en servicio el tramo entre Medinaceli y Ródena". Los presupuestos recogerán partidas de la autovía entre León y Valladolid y la variante de Segovia. Una reunión, en fin "muy fructífera", según Silván que certifica el por otro lado previsible parón del resto de autovías pendientes de Zamora, como la A-11 hasta la frontera de Portugal o la Palencia-Benavente.