Mar Rominguera tomará posesión de su puesto como nueva diputada en el Congreso durante el pleno que empieza el martes en la Cámara Baja, pero pretende también defender la moción presentada en el Pleno del Ayuntamiento del miércoles contra la propuesta del PP de que salga elegido alcalde el cabeza de la lista más votada en las elecciones locales. Es decir, Rominguera mantendrá inicialmente su puesto de concejala en el Ayuntamiento y tratará de compaginarlo con su nueva responsabilidad en el Congreso, donde sustituye a Antonio Camacho, aunque matizó que aún tiene que hablar con su grupo. Fue la propia concejala la que confirmó sus intenciones en el transcurso de la presentación del frente institucional que se propone abrir el PSOE contra la pretensión del Partido Popular de cambiar la ley electoral con el fin de que sea la persona que encabece la lista más votada la que se haga con la Alcaldía en los municipios.
El secretario provincial, Antonio Plaza y la procuradora Ana Sánchez, junto con Rominguera, hablaron abiertamente de "pucherazo" de cambiar las reglas a mitad de partido con un único fin de beneficio partidista. Por ello han presentado una proposición no de ley en las Cortes de Castilla y León, que se debatirá en el Pleno de esta semana entrante, una moción en el Ayuntamiento de la capital y otras entidades locales, que también se verá en el Pleno municipal del miércoles. El grupo de diputados socialistas ya presentó el pasado viernes una moción en la Diputación Provincial de rechazo a la fórmula que propone el PP, si bien la mayoría absoluta de este grupo político tumbó la propuesta, que iba en la dirección de oponerse al cambio de modelo electoral. De hecho, el PP sacó adelante la suya en apoyo de la iniciativa.
Plaza destacó el hecho de que hasta ahora el sistema político en España siempre ha contado con un amplísimo consenso, un acuerdo de las fuerzas políticas que ahora está lejos de conseguirse. Rompe también la tradición representativa de las elecciones en España; "Cinco más dos siempre serán más que seis". Sánchez apuntó que esta reforma está muy alejada de los problemas ciudadanos y la calificó de "propuesta trampa" que no trata de resolver ningún asunto de interés para la gente, sino que tiene como único fin "mantenerse en el poder" ante la perspectiva de un bajón electoral que haga perder a este partido muchas de las alcaldías que actualmente ostenta.
Rominguera puso de manifiesto que la reforma supone un nuevo ataque a la autonomía local.
