El establecimiento TDH, Taller Daniel e Hijo, ha iniciado una nueva andadura desde hace un año y medio. Pese a la complicada situación actual, sus responsables han apostado por el futuro de la empresa "siempre desde el optimismo", motor de cualquier negocio.

En esta renovada andadura, los responsables han elegido el tono verde como "color corporativo". "Queríamos ser como el verde intenso del árbol más robusto y vistoso que obtiene la fuerza de sus raíces", explican desde el establecimiento. "Unas raíces, nuestras raíces, que se han ido formando muy despacio, con muchos años de experiencia, trabajando en todo tipo de carrocerías y marcas de automóviles, cada una con su particularidad y su punto débil, cambiando lunas donde la meticulosidad, paciencia y las "sin prisas" son las reinas", explican.

En TDH, la auténtica pasión es la restauración de vehículos, una actividad "donde las agujas del reloj no se paran". Desde vehículos industriales a comerciales, camiones e incluso autobuses. Siguiendo esta metáfora "verde", los responsables de TDH apuntan que "mostrar la frondosidad de ese árbol a través de nuestras instalaciones y nuestro equipo de trabajo para que el cliente pueda beneficiarse del fruto y de una buena sombra con el trabajo bien hecho y utilizando primeras marcas que ofrezcan garantía, calidad y tranquilidad".

El taller del siglo pasado estaba orientado a la producción, contaba con gran volumen y buscaba mejorar la eficacia de la reparación. El taller del Siglo XXI se orienta a la gestión empresarial porque el mercado no garantiza un gran volumen de trabajo .Hay que gestionar los procesos no sólo de reparación sino de captación y fidelización del cliente, Con adecuadas instalaciones y equipos para luchar por la mejora continua de la producción, cualificación y una formación continuada del personal. De la idea de negocio a la llamada rentabilidad sostenible.

En TDH, "nos gustaría que desde cualquier punto que nos observaran, al pie de calle, en conversación o desde la modernidad de Twitter y Facebook siempre vean lo mismo: un taller del siglo XXI".