La huelga del servicio de limpieza en colegios públicos y edificios municipales se recrudece tras una semana en marcha y después de que ayer nueve de los quince centros educativos públicos afectados amanecieran con palillos y silicona en sus cerraduras, y con basura vertida en los patios exteriores, cubiertos de huevos rotos, miel y papeles hechos pedazos.

Las incidencias han sido recogidas en un informe documental y fotográfico elaborado por la Policía Municipal que el Ayuntamiento remitirá a Seralia para que tome medidas. De lo contrario, la institución planteará acciones como la posible rescisión del contrato, tal y como ya ha anunciado el portavoz del equipo de Gobierno, Francisco Javier González.

Las trabajadoras del servicio niegan la autoría de los hechos y aseguran que «no sabemos quiénes habrán sido los responsables de las actuaciones, nosotras cuando hemos llegado a las 5.30 de la madrugada a informar a la compañera que estaba de mínimos ya nos encontramos así la situación», defiende una de las empleadas.

Tanto el delegado territorial de la Junta, Alberto Castro, como el portavoz municipal hablan de «acciones premeditadas para ensuciar la zona exterior de los centros, y esa situación no se produce ni por la acción de niños ni de profesores», subrayó Castro. En el mismo sentido se expresó ayer Francisco Javier González que, aunque no quiso acusar a nadie de manera directa, hizo alusión a tres posibles responsables: «Los piquetes, aunque yo no pretendo acusar a ningún sindicato; la propia empresa, lo que parece a priori bastante absurdo; o una cuestión de índole política dentro del actual contexto contestatario».

Ante esta situación, la plantilla tiene claro que seguirá adelante con la huelga «caiga lo que caiga y cueste lo que cueste, porque ya no nos pueden reducir más», apuntan, sin tener hasta ahora noticias de la empresa. En cualquier caso, reivindican el apoyo de los padres «para hacer más presión», de ahí que estén preparando una nueva manifestación para exigir sus derechos y plantear una solución al conflicto.