Los almejas y el marisco en general son los productos que experimentan una mayor variación de precios, que depende en gran parte de las calidades que se ofrecen. Los langostinos pueden encontrarse en un abanico de hasta 5 euros por kilo dependiendo de varios factores, mientras que las almejas registran variaciones similares. Las cigalas se pueden encontrar desde 30 euros hasta 48.

Algunos productos de pescadería han experimentado una bajada importante si se comparan los precios con los de las navidades pasadas. De esta manera, por ejemplo, el salmón cotizaba a 12,90 euros a 22 de diciembre del año pasado, mientras que ayer su precio apenas superaba los 10 euros. Los langostinos congelados, que el año pasado por estas fechas oscilaban entre los 7 y los 13 euros el kilo, dependiendo del tamaño y de la calidad del producto, apenas han variado.

El lechazo registra niveles similares al año pasado, aunque si se echa un vistazo a los precios de hace un mes se puede comprobar que ha experimentado una subida de unos 2 euros por kilo, al igual que el cochinillo.

Además de los alimentos frescos que más se venden durante estos días, existen otra serie de productos cuya presencia en la mesa se ha hecho imprescindible durante estas fechas. Por ejemplo, las uvas, que sirven para recibir la entrada del año. El precio que marcaban ayer en el mercado estaba cerca, e incluso por debajo, de los dos euros, muy similar al del año pasado y al de hace un mes, por lo que se trata de un producto que de momento no ha subido, si bien es previsible que su consumo se dispare la semana que viene. Las piñas también están a buen precio, incluso «baratas», como decía ayer una consumidora.