El Nazareno de toda Zamora

Pese a la tarde un tanto desapacible por el viento, cientos y cientos de zamoranos se acercaron el Jueves de Pasión hasta el barrio de San Frontis para acompañar al Nazareno en su camino desde el otro lado del río hasta el primer templo diocesano, en su recorrido arropado por sus vecinos y por muchos semanasanteros, en un discurrir envuelto por la ciudad.

La plaza de San Frontis era un ir y venir de gente que querían hacerse con el buen sitio media hora antes de la salida de la imagen desde el templo románico donde recibe culto habitualmente, mientras que el otro lado del río grupos de jóvenes y personas que peinaban ya canas aguardaban la llegada del traslado consumiendo las tradicionales pipas, las primeras pipas de la Semana Santa de 2023.

VUELVE A VER AQUÍ EL TRASLADO:

En mitad de la plaza en dirección hacia la avenida del Nazareno se situaron el barandales Jesús Rodríguez acompañado del hombre que portaba la cruz guía. Se les acercaban muchos niños que miraban con cierto recelo las esquilas e incluso alguno se atrevía a moverlas, quizá su primer sonido de la Pasión de Zamora para esos futuros cofrades.

Cuando una niña estaba mirando las campanas se acercó Nicanor Fernández, el barandales habitual de varias cofradías zamoranas que, a causa de una enfermedad, el pasado año tuvo que delegar en sus compañeros el menester de anunciar la llegada de la procesión.

El barandales Nicanor Fernández inicia la procesión

"Parece que no van a tardar mucho en salir", comentaba un matrimonio de mediada edad que observaba cómo algunos se acercaban a saludar a Nicanor Fernández. "Este año iré hasta la primera rotonda" decía minutos antes de la salida del Mozo el barandales de Nuestra Madre y de la Junta pro Semana Santa de Zamora. A lo que su compañero de oficio añadía "que sea él quien toque las primeras campanas de esta Semana Santa".

Y así fue. Con una inmensa sonrisa y vestido de calle Nicanor Fernández tomó las campanas y comenzó a moverlas hasta el punto previsto donde se fundieron en un abrazo y se dieron el relevo.

Pasaba un minuto escaso de la hora prevista de salida de la imagen cuando el madero de la cruz comenzó a atisbarse. Poco a poco el paso avanzó. Los músicos de la Banda de Música maestro Nacor Blanco interpretaron el himno nacional. Al compás de la partitura los cargadores bailaron la imagen que iba andando entre los edificios del barrio, en cuyos balcones había reposteros con el rostro de la imagen del Mozo.

Al son de marchas

Su camino, al son de marchas como "Nazareno de San Frontis" se podía ver a través de las pantallas de los teléfonos de los móviles que eran elevados. "¡Qué pena que vivan todo a través de las pantallas!" comentaba una señora que formaba parte de los muchos vecinos de San Frontis que acompañó a Jesús en su tradicional recorrido hasta la seo, un periplo donde muchos le escoltaron rezando y portando con velas que tuvieron que desafiar el viento reinante, sobre todo, en las inmediaciones del Puente del Piedra.

GALERÍA | El traslado del Nazareno de San Frontis en Zamora, en imágenes

Ver galería

Mayordomos

La comitiva prosiguió hacia el casco antiguo para en la plaza de Fray de Diego de Deza sumarse los mayordomos que, en representación de la Cofradía del Vía Crucis tal y como anunció su presidente Toño Pedrero, recibieron a la imagen. El Mozo, adornado con sencillos claveles rojos, aguardará en la seo zamorana hasta el próximo Martes Santo cuando regresará a su casa, a su templo, acompañado por los cofradías del Vía Crucis y por la Virgen de la Esperanza.

Suscríbete para seguir leyendo