El casco histórico de Zamora estrena fibra óptica. Lo hace exactamente catorce años después de que Telefónica comenzara a ofrecer este servicio a sus clientes de manera generalizada. Aquello ocurrió en el año 2008, pero hasta la fecha nadie había apostado por introducir esta tecnología en la zona vieja de la capital. Las trabas y la falta de decisión política contribuyeron durante años a que, desde la Plaza Mayor hasta la Catedral, se viviera todavía en el siglo XX. Hasta ahora. El encendido oficial de la red está previsto para esta misma semana, aunque se irá procediendo de manera progresiva durante los primeros días del mes de julio. Más de 1.800 viviendas y 700 fincas se beneficiarán de esta puesta de largo de una conexión que ofrecerá Internet un 16.000% más rápido. De 6 a 1.000 megas, ni más ni menos.
Adamo Telecom ha sido la compañía encargada de desplegar la fibra óptica por el casco histórico. Lo ha hecho con el respaldo de las administraciones. Concretamente, desde la empresa destacan la colaboración del Ayuntamiento de Zamora, a quien han agradecido su “papel activo” para cerrar un plan en una zona tan compleja como es la parte vieja de la capital.
El cableado comenzó hace un mes, siguió de forma intensa a lo largo de junio y la señal estará plenamente en funcionamiento a principios de julio. La puesta en marcha del servicio se enmarca dentro de un plan de despliegue progresivo para el centro de la ciudad que incluye todo el casco histórico, la Catedral y los miradores sobre el Duero. En total, Adamo conectará 1.800 viviendas y 700 fincas por medio de su fibra óptica. Además, se ha trabajado también en el barrio de Olivares, donde se procederá al encendido tecnológico “de manera inminente”, tal y como han señalado desde la compañía. Gracias a esta instalación, los vecinos del casco histórico podrán navegar con una velocidad que será un 16.000% más rápida que el ADSL, lo más veloz que existía hasta la fecha en la zona.
La firma Adamo Telecom, encargada del plan de despliegue, ha tenido que presentar una declaración responsable de obras para las actuaciones en parcelas privadas que no tuvieran impacto en el patrimonio histórico; una autorización de uso provisional cuando se trataba de parcelas privadas incluidas en terrenos clasificados por el vigente PGOU como suelo urbanizable; y una licencia urbanística cuando eran parcelas de dominio público municipal y produzcan impacto en el patrimonio histórico. El pasado mes de enero, la Comisión Territorial de Patrimonio informó favorablemente para el desarrollo de este plan de despliegue y desde entonces se ha trabajado en colaboración público-privada para hacerlo realidad. Este movimiento busca dar respuesta a las reclamaciones que durante años han realizado los vecinos, que han mostrado su malestar en no pocas ocasiones, aunque con más vehemencia a raíz de la pandemia del coronavirus y el auge del teletrabajo.
La compañía es una vieja conocida en la provincia de Zamora, donde proporciona Internet en más de 70 municipios. De hecho, es una de las empresas adjudicatarias del Programa de Banda Ancha a Nueva Generación (PEBA-NGA 2020-2022), financiado por el Estado y la Unión Europea, tanto en la convocatoria de 2020 como en la de 2021, así como en el Programa ÚNICO-Banda Ancha, habiendo recibido en total 107 millones en subvenciones.
