“Aquí son famosas las ambulancias de Zamora porque tardan en recoger a los enfermos. Veremos a ver cuándo vienen”. El pronóstico del personal del Complejo Asistencial de Salamanca se cumplió: el enfermo zamorano, con una patología cardíaca y diabético esperó durante tres horas y media, y “sin monitorizar”, tras ser sometido a unas pruebas de corazón, a que el vehículo equipado le recogiera para devolverlo al Hospital Virgen de la Concha.
“Lo que más le indignó fue el comentario y que coincidieran varios trabajadores del Hospital salmantino en decirme que esta situación no se da con enfermos de otras provincias de Castilla y León”, declara el paciente de Cardiología que sufrió el desajuste horario y que permanece ingresado en el Clínico de Zamora.
La concesionaria del transporte sanitario para la comunidad autónoma, Ambuibérica, parece dispensar a los enfermos de Zamora una atención menos diligente que con el resto de castellano y leoneses, puesto que “nunca se sabe el tiempo de espera" que te tocará soportar. "Pido que tengamos el mismo trato que las demás provincias, cuyas ambulancias esperan a los enfermos para volver a llevarles a sus lugares de origen. Que las de Zamora esperen también”.
Pero los percances por los que pasó este zamorano habían comenzado ya antes de abandonar el Hospital Virgen de la Concha, “me dijeron que vendrían a recogerme a las 7.30 horas porque a las 8.30 tenía que estar en Salamanca para hacerme las pruebas en ayunas”. Al final, tuvo que acudir a recogerle una ambulancia desde la ciudad charra, “que llegó a Zamora a las 9.30 y al hospital de allí a las 10.35, con dos horas de retraso sobre el horario previsto”, denuncia.
La larga espera le mantuvo sin comer desde las 20.00 horas del día 2 de junio hasta las 17.30 horas del día 3, un ayuno que tendría que haber concluido poco más allá de las 14.00 horas ya en Zamora, puesto que los médicos salmantinos terminaron de practicarle las pruebas a las 13.00 horas. “Hasta las 16.30 no llegaron a buscarme y entré por la puerta del Virgen de la Concha una hora después con solo un paquetito de galletas y un vaso de agua en el estómago”. El personal de Salamanca se apiadó de él y, sin tener obligación, le dio ese tentempié, “se portaron muy bien”.
Cuando pidió a los empleados del Complejo Asistencial de Salamanca que llamara a las ambulancia para ver qué estaba pasando, tuvieron que hacerlo “tres veces, la primera les contestaron mal, diciendo que la ambulancia ya venía de camino, que era mentira”. Ya le habían insinuado a este paciente de Zamora que tardarían, premonición que no solo se cumplió, sino que se corresponde con una realidad que causa quejas continuas por parte de los usuarios.
La espera dio de sí, “una enferma de Zamora capital de 85 años me contó que la recogió la ambulancia para hacer pruebas en Salamanca, pero hizo ruta, la trasladaron por Viñuela de Sayago y llegó dos horas y picos después de iniciar el trayecto. Le pidió disculpas el personal de la ambulancia. Y, cuando yo me fui del hospital salmantino, se quedó allí sin saber cuándo irían a buscarla y si tendría que hacer paradas”.
Otra desplazada contó que le dieron el alta en Zamora y la ambulancia llegó a las 3.00 horas para llevarla a una residencia donde reside que está a 60 kilómetros de la capital. No mucho mejor lo tienen los habitantes de Sanabria, se ha dado el caso de recibir el alta a las 15.00 horas y tener que aguardar hasta las 24.00. “La señora, que era mayor llegó unas dos horas después a su casa sanabresa”, agrega el zamorano. Otro hombre al que colocaron dos stents en Salamanca a las 12.00 horas no vio la ambulancia hasta las 18.00: “La centralita había enviado el vehículo sanitario a Valladolid”.
