Aunque Bernardo Pantoja falleció en noviembre de 2022, no ha sido hasta ahora cuando su presunto hijo ilegítimo, Luis Vicente Rico -más conocido como 'Pinocho'- ha interpuesto una demanda contra Anabel Pantoja para reclamar legalmente el apellido de la cantante de 'Marinero de luces'.

De la mano del abogado Fernando Osuna -que ha llevado demandas de paternidad tan mediáticas como la de Javier Santos contra Julio Iglesias, o la de Manuel Díaz 'El Cordobés'- el sevillano ha iniciado medidas legales contra la influencer para que se someta a las pruebas de ADN que demostrarían que son hermanos.

Y, en el caso de que Anabel -que nunca ha querido saber nada de 'Pinocho'- se negase o no se presentase a la citación del juez en el Instituto Nacional de Toxicología, el letrado ya ha advertido que es más que probable que el joven pase a ser reconocido como hijo de Bernardo automáticamente.

Un inesperado varapalo que ha pillado a la sobrina de Isabel Pantoja de escapada romántica a Roma con su novio, David Rodríguez. Un viaje en el que la demanda de 'Pinocho' no ha sido el único disgusto, puesto que un ladrón intentó robar el bolso a Anabel mientras comía en un restaurante. Y si no llega a ser por el camarero y por la rapidez de su pareja, lo hubiese logrado, como ella misma compartía indignada con sus seguidores.

Por suerte, no ha habido más sobresaltos y este domingo la influencer llegaba a Madrid feliz tras unos días de vacaciones en los que ha conseguido desconectar de la demanda de su presunto hermano. "Todo bien, todo bien, estoy reventada. Todo perfecto" ha afirmando cuando le hemos preguntado qué tal el viaje y si había podido solucionar lo de su amago de robo, confirmando con un "sí claro" que ha denunciado al ladrón. "No ha ido a mayores gracias al camarero y a David, pero la gracia... hay que tener mucho cuidado" ha añadido.

Una amabilidad que se ha convertido en silencio absoluto con las preguntas relacionadas con el polémico contrato que el promotor de Isabel Pantoja ha firmado con el Cabildo de Gran Canaria para que su tía promocione la isla en sus conciertos. Muy seria, Anabel ha dado la callada por respuesta a esta polémica en la que se ha visto envuelta la cantante, sin pronunciarse tampoco sobre los rumores que apuntan a que la viuda de Paquirri podría estar ilusionada de nuevo en el amor. "Te importa, estoy aquí ya pidiendo el Uber y eso. Es que no te voy a contestar" ha sentenciado.

Y ha sido al escuchar el nombre de 'Pinocho' y cómo se siente tras la demanda para demostrar que son hermanos cuando Anabel, cabizbaja y sin poder disimular lo que le afecta, cuando ha pedido al reportero que no le pregunte más por este asunto: "Perdón, no te quiero coger con las ruedas de la maleta los pies porque después dicen que atraco y al cámara igual. Gordis por favor" ha zanjado.