¿Es posible adelgazar caminando? Te sacamos de dudas

Las personas que desean ponerse en forma o bajar de peso ven el ejercicio como un esfuerzo hercúleo y doloroso, pero la realidad es que con salir a caminar se pueden lograr grandes progresos. Eso sí, existen una serie de pautas que te ayudarán a distinguir entre un simple paseo y una caminata completa.

El milagro de caminar

En primer lugar, es fundamental llevar una intensidad media. Lo ideal es mantener el ritmo en torno a los 5 kilómetros por hora. El número de salidas recomendado es tres a la semana de una hora cada una, como mínimo.

Resulta muy útil para controlar estos parámetros usar una pulsera de actividad, que te indicará la velocidad, el tiempo, el ritmo cardiaco y el consumo calórico de la marcha.

Cuida la técnica y la postura. Evita dar grandes zancadas; en su lugar, mantén tu paso natural pero a un ritmo superior. También es esencial llevar un calzado cómodo, a poder ser zapatillas deportivas, y ropa transpirable.

Si ya dominas estos aspectos, prueba a alternar la intensidad. El cuerpo se beneficiará de los cambios de ritmo. También puedes complementar la caminata con actividades complementarias como subir o bajar escaleras.

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Y, lo más importante, diviértete caminando. Hazlo en compañía o solo, con tu música o tu podcast favorito. Lo importante es disfrutar.