Un paseo por el lienzo urbano de Toro

Los murales en las paredes y tapias de las calles se han ido transformando, con el paso del tiempo, en una nueva forma de hacer arte accesible para todos los públicos. Gracias a ellos, las calles son galerías abiertas, además de ser un importante recurso turístico y didáctico para la ciudad, ya que, con ellos tanto mayores como pequeños pueden conocer la historia de Toro. A través de los murales se han podido transformar paredes en desuso, malgastadas, viejas… por lienzos en grandes dimensiones, con los que se narran historias, que provocan emoción en la gente.

En la localidad toresana hay casi una veintena murales repartidos por las calles de la ciudad, entre las diferentes paredes y tapias, realizados por Toro Arte Urbano (TAU), proyecto creado y gestionado por el artista Carlos Adeva. TAU fue creado en el año 2016, con las Edades del Hombre, con la finalidad de "rehabilitar las zonas que están más dañadas visualmente y recuperarlas y, de esa forma, ofrecer al ciudadano una visión nueva del espacio", señalan.

El proyecto, según indican desde TAU, "consiste, a largo plazo, en producir murales, con el fin de crear una galería de arte a ras de suelo". Además, tiene una visión a corto plazo, ya que también consiguen "humanizar y embellecer el espacio", y de esa forma "hacer cultura", detallan desde TAU. "Es una oportunidad tanto de consumo, como de producción cultural", añaden. En el proyecto tiene importancia la participación ciudadana, y es que, en varios murales, han colaborado algunos profesionales de la localidad, amateurs y varios vecinos que han decidido coger el pincel y ayudar a que este proyecto salga adelante. "Las obras son llevadas a cabo a través de un proceso de arte comunitario, en el que el público además de ser el consumidor participa en la producción", resalta el creador del proyecto.

Cada uno de los murales realizados por la asociación es creado de forma específica para su localización. Un ejemplo es el caso del mural de la “Leyenda del Arco del Reloj”, situado al lado del monumento y en el que se puede ver su construcción; o la pintura realizada en la pared situada en el Puerto de la Magdalena en la que se pueden observar a los diferentes personajes de la Batalla de Toro. Además de estos casos, a lo largo de la ciudad hay muchos más murales que, tanto toresanos como turistas pueden visitar y conocer otro punto de vista diferente.

Toro Arte Urbano propone varias rutas de murales: en primer lugar, la de aquellos que se pintaron en el 2016 en las ventanas y puertas que había en desuso en la localidad y en las que los carteles desgastados con el tiempo se han convertido en arte en abierto para todos. Estos murales están situados en diferentes calles de la ciudad, rodeando la zona más céntrica, como son: la calle Mayor, Perezal, Candelero, La Antigua, Odreros y la calle Corredera.

La fiesta de la Vendimia de Toro, musa del arte urbano

Además, hay una segunda ruta que se puede hacer, formada por los murales más grandes. Estos muestran historia a través del arte, como es el caso de la Batalla de Toro; o conocer la figura de Jesús López Cobos, en los alrededores de la Escuela de Música. También se puede observar uno que representa la fiesta de la vendimia, en el que se ve el desfile de carros engalanados a la antigua usanza, conocer la leyenda de la construcción del arco del reloj o, incluso, poder realizar un homenaje a la Batalla de Villalar, utilizando los muñecos playmobil.

Hoy en día, el turismo muralista está cada vez más presente en muchas localidades, ya que es un medio a través del cual, cualquier ciudadano tiene el acceso libre a ver estas galerías de arte repartidas por las diferentes calles. Según indica Carlos Adeva, el proyecto "sigue abierto por el momento", y es que el artista incide en que tiene más propuestas "con las que poder afianzar mejor las rutas".