La carretera N-122 entre Toro y Zamora, repleta de baches

Usuarios de la carretera N-122 han criticado el deficiente estado de conservación y el deterioro del pavimento en el tramo que conecta Toro con la capital zamorana, en el que la gran cantidad de baches y socavones supone un riesgo para la seguridad de los conductores.

A lo largo de todo el tramo de poco más de 30 kilómetros, como aseguran, se suceden “numerosos baches” que, al margen de poner en peligro la integridad de los conductores que circulan por la vía, pueden provocar importantes averías en vehículos o reventones de ruedas.

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Al deterioro del firme de la carretera añaden que, por las intensas lluvias registradas en los últimos días, se ha desprendido “gravilla” de los “agujeros” que habían sido bacheados por operarios del área de mantenimiento de carreteras, lo que incrementa el riesgo de accidente.

Aunque usuarios de la carretera reconocen que como vía alternativa para pueden utilizar la autovía A-11 para desplazarse a la capital, son muchos los que siguen utilizando la N-122 si se dirigen a otros municipios cercanos, porque la conexión es más directa. Otros usuarios siguen utilizando la carretera nacional para acceder a sus parcelas de cultivo, fincas de recreo o a empresas situadas en el tramo de la N-122 que conecta Toro con Zamora, en el que los continuos baches condicionan una circulación segura.

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Del mismo modo, recuerdan que en el citado tramo está enclavado el campamento de Monte la Reina al que, en los últimos meses, han accedido camiones y maquinaria pesada para llevar a cabo los trabajos de desbroce, limpieza y adecuación de un nuevo vallado, circulación de vehículos que, como apuntan, ha podido agravar el deterioro del pavimento.

Para algunos usuarios, el estado que presenta el firme de la carretera N-122 es una muestra más del “abandono” de la red viaria provincial, por lo que reclaman una actuación urgente para evitar accidentes.

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