El grupo Vacceos de Morales cumple una década poniendo en valor los bailes regionales

Trajes regionales, música tradicional y acción. La docena de mujeres que componen el grupo Vacceos de Morales de Toro se ponen a bailar mientras suenan las notas de canciones populares como la "Jota de Morales", "El bolero de Algodre" o "Las cintas", entre otras muchas que se encuentran en su repertorio.

Y así suman ya diez años, poniendo color y música a los festejos de la localidad moralina y a otras fiestas de la provincia como la Vendimia de Toro, festividades en Zamora capital, Uña de Quintana, misas castellanas o galas benéficas. Para estas mujeres, pertenecer al grupo Vacceos es casi todo un oficio ya que todas las semanas del año acuden al local de ensayo que tienen en el Ayuntamiento del municipio. Allí aprenden nuevos bailes y canciones y perfeccionan las piezas que ya conocen al dedillo.

Aunque, como reconoce la presidenta del grupo, Flori Sandoval, "hay que hacer muchos sacrificios y los hemos hecho todas". Según cuentan, a veces, dejan a los familiares en casa durante horas en las que ellas se dedican a seguir manteniendo viva la tradición.

Y es que, aunque es un grupo formado íntegramente por mujeres, también podría decirse que los hombres forman, de alguna manera, parte de este conjunto de folclore porque, según reconoce una de sus integrantes, "los maridos nos ayudan, nos han aguantado y aguantan mucho".

Una cuarta parte del grupo Vacceos es infantil. Lucía, Laura y Aroa son las encargadas de recoger la tradición que ya les están inculcando sus mayores. Así, algunas de ellas han llegado hasta el grupo de la mano de sus abuelas. En otro caso, como el de Inmaculada Gallego, ha sido la madre quien ha entrado en el grupo a través de su hija. "Empezó la niña y, como me gusta el baile en general, en vez de estar mirando, me puse a bailar", cuenta Gallego.

Otra de las últimas incorporaciones, Minda Moreiras, vive en Vezdemarbán, pero no duda en viajar hasta Morales de Toro cada vez que el grupo Vacceos tiene ensayo o debe acudir a algún evento. "Es nuestra tradición la que deberíamos rememorar, nos tiramos más por sevillanas y lo nuestro es esto", expresa Moreiras.

Son mujeres que no sólo cantan y bailan, sino que también cosen y bordan los trabajados y coloridos trajes típicos que lucen en cada una de sus actuaciones. "Tenemos demasiado empeño. Esto es fuerza de voluntad, amor propio y amor al arte", reconocen orgullosas de mantener viva la tradición castellana.