Valladolid,

Bruce Springsteen logró anoche abarrotar el estadio «José Zorrilla» de Valladolid con un lleno histórico que concentró a 30.000 almas dispuestas a arroparle y dejarse llevar por la contundencia de su directo.

Apenas un cuarto de hora después de las 21 horas arrancó un concierto histórico en el que no faltaron clásicos como «Badlands», «Born to run», «Dancing in the dark» o «The rising», que el de Nueva Jersey alternó con piezas de su último álbum como «Working on a dream» o «Outlaw Pete».

Acompañado de su inseparable E Street Band, y siempre dando lo mejor de sí mismo en el escenario, el «Boss» se metió en el bolsillo a los fieles, que habían amanecido en la ciudad con una mañana muy lluviosa y un cielo encapotado, que se abrió al sol para recibir a Springsteen y los suyos tras los espectáculos de Bilbao, Sevilla y Benidorm. la lluvia hizo temer que se suspendiera el concierto, aunque finalmente el «Boss» pudo salir al escenario.