Frío polar

Después de unos días, al sábado le remito, con temperaturas propias del verano y un clima más que agradable, la semana que ahora estrenamos llega precedida de los peores augurios meteorológicos. Nos vienen avisando con insistencia de la llegada de una borrasca que penetrará en España por el Atlántico y que precederá a una masa de aire polar que desplomará las temperaturas. El clima estable se mantendrá durante los próximos días. Quienes no se harán esperar son las temidas heladas tardías muy peligrosas para las cosechas.

El próximo sábado se celebra la festividad de San Isidro Labrador, hay que pedirle que eche una mano a los agricultores zamoranos, como se la echaron al santo mozárabe desde lo más alto. Creo en los milagros. Basta con que impida que las cosechas se malogren por culpa de los hielos tardíos y de ese frío polar que se anuncia con insistencia.

No ganamos para disgustos por culpa de la meteorología. El pasado mes de abril fue el más frío en Europa desde 2003. Y eso a pesar de que la temperatura media del planeta se ha situado por encima de la media para esta época del año. Eso asevera la Organización Meteorológica Mundial. Yo lo que sé, porque así nos lo han contado los hombres y mujeres del tiempo, es que la borrasca que pesa sobre la península traerá un tiempo caracterizado por las precipitaciones y la caída brusca de las temperaturas en lo que se conoce como los “santos de hielo”. Le juro que en mi vida había oído hablar de ellos.

Al parecer, las heladas tardías que llegan en mayo, y que ni puñetera falta que hacen, coinciden con la celebración de varias festividades religiosas, entre el 11 y el 15 del presente mes, presididas por distintos santos que van de San Mamerto y San Pancracio a San Isidro Labrador. Aunque no siempre coincide con estos santicos e incluso en ocasiones ni se produce este fenómeno. Se trata de una creencia popular. Las heladas tardías son cosa del pasado.

Calendario en mano, sólo San Pancracio y San Isidro Labrador se dan cita en las calendas de esta semana. Hoy lunes el santoral nos dice que se conmemora la festividad de San Juan de Ávila y el jueves, 13 de mayo, cuando la Virgen María bajó de los cielos a Cova de Iría, se honra a Nuestra Señora la Virgen de Fátima. A ver si por su intercesión el miedo polar que nos han metido en el cuerpo se queda en agua de borrajas. No obstante esa bajada de trece grados que anuncian para Zamora no hay que tomársela a broma.