Recuperación vs. repoblación

Resulta que los 140.000 millones de € que van a llegar por obra y gracia de nuestros socios europeos, del llamado Fondo de Recuperación (o Reconstrucción), como consecuencia de la pandemia que estamos sufriendo en nuestro país, los va a gestionar directamente el gobierno sociocomunista que nos ha tocado padecer. Imaginaos el percal, después de una gestión pésima y hasta espeluznante de la crisis sanitaria (y lo que nos queda por sufrir… que no va a ser poco).

Mucho me temo que, a nuestra querida provincia de Zamora, le van a llegar las migajas que queden sobre la mesa después de que se repartan el momio en otros territorios más atractivos, en términos electorales, para Sánchez e Iglesias. Vamos a depender de la capacidad negociadora del diputado Fagúndez y del senador Fernández, F&F, para que no volvamos a ver pasar otro plan por la ventana mientras se premia la singularidad, o la supuesta “superioridad”, de otros territorios con otro Rh u otra sinrazón parecida.

Sabemos que este dinero estará vinculado a ciertos proyectos, que posibiliten reformas estructurales para no tener que acudir, de nuevo, a mamá Europa si vienen mal dadas. Pero disponer de fondos adicionales supondrá que el Gobierno de España tenga más fondos propios para dedicar a los proyectos olvidados de la España que, muchas veces, se siente maltratada.

Pues bien, para reconstruir (o recuperar) la Zamora “post COVID”, debemos situarnos en la Zamora “pre COVID” y pensar, en serio, o repensar que, para paliar los daños ocasionados por este virus, lo mejor será hacernos fuertes en lo que ya teníamos claro antes: los proyectos pendientes en nuestra provincia, sobre los que, en justicia, deberíamos tener algún derecho ya consolidado… Digo yo…

Monte la Reina necesita un impulso y 85 millones de euros. Si las competencias son del Estado y el Gobierno tiene dinero para reconstruir, reconstruyamos el viejo campamento que vendrá con un valor añadido bajo el brazo: el asentamiento de población. No es mucho pedir, cuando el actual presidente del Gobierno se atrevió, en plena campaña electoral, a anunciar a bombo y platillo su ya conocido “siiii, vamos a repoblar…”. Este es un proyecto de todos, estamos de acuerdo, aunque no se me olvida la foto más excluyente que he visto nunca: la del diputado Fagúndez con la ministra de Defensa sin la presencia del alcalde de Toro, el entonces socialista Tomás del Bien.

La biorrefineria de Barcial del Barco, aunque ya tiene inversores, seguro que necesita ayudas para ser, por fin, una realidad que reactive la economía de la zona. No soy capaz de ponerle números, pero seguro que los promotores le dan la idea a Fagúndez y Fernández en menos de dos segundos. Y no olvidemos que el empleo son los cimientos para asentar población, y asegurar el estado del bienestar.

Otro gran proyecto para la comarca de Benavente es la Puerta del Noroeste. Poco más de 12 millones de euros, con el compromiso de Junta y Diputación, del que no se sabe el interés que tiene el Gobierno de Sánchez, así que F&F ya están tardando en contárselo. Apostar por este proyecto permitiría a Junta, Diputación y el propio Ayuntamiento disponer de esos fondos para otros proyectos.

La autovía a Portugal parece condenada al olvido, visto lo visto. Pues bien, señores, sepan que los zamoranos necesitamos que se reactive para poder reconstruirnos adecuadamente. Este proyecto, que lo metieron en el cajón del olvido, estaba cuantificado, inicialmente, en 328 millones de euros.

Sigo: la alta velocidad de acceso a Internet. No es suficiente llegar al 84% de los pueblos de Zamora en no sé cuánto tiempo. En pleno siglo XXI, este modelo no sirve. Al final se pueden quedar, una vez más, al margen del desarrollo tecnológico, muchos de nuestros vecinos: pequeños negocios, casas de turismo rural, niños aislados sin acceso a las clases online, que pueden regresar en poco tiempo. A pesar del compromiso de la Junta de Castilla y León, con su presidente al frente, Alfonso Fernández Mañueco y la propia Diputación Provincial, con Requejo y el Grupo Popular a la cabeza, para que, por fin, el proyecto salga adelante, la competencia es del Estado, y si tiene dinero, como así será, debe invertirlo. Otra tarea para F&F que deben pedir para reconstruir al 100% las maltrechas y obsoletas líneas de comunicaciones en nuestra tierra.

Y aquí, me voy a permitir una licencia, porque en una provincia en la que la vida tranquila es una realidad antes de que le pusieran el rimbombante nombre de “slow life”, necesitamos alta velocidad para poder hacer sostenible este modelo. Nosotros cumplimos con el AVE, y ahora toca el acceso a internet y la conexión con Portugal: “fast accessibility for a slow life”.

Discriminación positiva, reconstrucción, repoblación, deuda histórica, me da igual como lo llamen. Necesitamos que F&F se batan el cobre con Sánchez para traer dinero a nuestra provincia de ZAMORA. ¡Es urgente! Ánimo y si necesitan ayuda, ya saben dónde estamos. Lo hemos hecho muchas veces (cada vez que el PSOE gobierna y acaba arruinando al país entero).

Atentamente.

(*) Vicesecretario de Organización del Partido Popular de Zamora