Si te has decidido a hacer una escapada a la nieve, aquí te hacemos la lista de todo el material de esquí que necesitas. Recuerda que, si no tienes, en la mayoría de estaciones puedes alquilar el material básico, como los esquís y los palos.

Tablas: provistas de recubrimientos laterales de acero para posibilitar la modalidad del esquí alpino.

Fijaciones: pueden ser inmóviles (esquí alpino), semi-móviles (fondo) o mixtas (travesía). Su rigidez depende de la modalidad y técnica usada.

Bastones: para ayudar en los giros. Disponen de un mango para cogerlos, con una correa para fijarlo en la muñeca, y un tubo de fibra sintética, o de aluminio, o de una aleación de metales ligeros. Cerca del extremo inferior se encuentra la estrella o tope para que no se hundan en la nieve.

Ropa: adecuada para proteger de las bajas temperaturas y la humedad.

Gafas: necesarias para proteger los ojos del viento y la radiación solar al practicar esquí o snowboard. Pueden ser de montaña o de sol.

Gorra: puede ser también una cinta. Debe ser de lana, ya que, además de proteger las orejas del frío, protege la cabeza de cualquier caída. Cuando este deporte se practica a una velocidad considerable, se debe utilizar un casco por motivos de seguridad.

Guantes: deben ser impermeables y aptos para prevenir congelaciones.

Casco: no es obligatorio llevarlo, pero es recomendable, porque protege la cabeza de golpes y mantiene el calor sin necesidad de ponerse gorra mientras se practica el esquí.

Tortuga: tampoco es obligatorio, pero como el casco es recomendable este material de esquí, sobre todo si se tiene un nivel elevado y no se tiene miedo a bajar rapidísimo o de hacer saltos peligrosos. Como da a entender el nombre, este objeto es similar a la concha de una tortuga, ya que protege la espalda de golpes.