Fútbol

El clásico entre un Real Madrid pletórico y un Barça deprimido decide si todavía hay Liga

El equipo de Ancelotti quiere cerrar el título movido por la felicidad de la clasificación para semifinales de Champions

El conjunto de Xavi se juega la última bala después de caer eliminado ante el PSG y ver cómo su vestuario se rompía

Camavinga y Lewandowski, en el Barcelona-Real Madrid de la primera vuelta de la Liga.

Camavinga y Lewandowski, en el Barcelona-Real Madrid de la primera vuelta de la Liga. / EP

Denís Iglesias

La utilización del término 'clásico' ha terminado perdiendo su valor para aludir al duelo Real Madrid-Barcelona. Hay tantos al año que se ha desnaturalizado su significado. Pero la segunda cita en Liga de la temporada 2023/2024 tenía aire de partido grande. Por lo menos hasta hace una semana, cuando el Barça y el Real Madrid divisaban las semifinales de Champions. El conjunto azulgrana parecía un rival capaz de rendir en Europa y apurar sus opciones en Liga. Sin embargo, la muerte en Europa de los de Xavi y las consecuencias de la misma convierten el encuentro de hoy (21.00) en un ultimátum.

Las ruedas de prensa de los entrenadores son ilustrativas del estado de ánimo en el que se encuentran dos rivales distanciados en ocho puntos en Liga. Sin embargo, existe un abismo en la gestión entre ambas entidades. Ancelotti estuvo relajado ante los medios. Presumió de la resistencia defensiva que demostró el Real Madrid frente al Manchester City, al que terminó derrotando en los penaltis.

"No he visto a ningún aficionado triste por cómo jugamos", ironizaba Carletto. El italiano se puso por encima del debate de los estilos. Los suyos llegan plenos de confianza frente a un contrincante que le falta precisamente eso. "Hemos de lograr cambiar el chip. Que esta rabia, frustración e impotencia del otro día, que se vuelva a favor nuestro. Tenemos delante un Real Madrid fuerte y reforzado moralmente tras esta semana de Champions", admitía Xavi, quien fue expulsado frente al PSG.

La disputa entre Gundogan y Araujo en el Barça

"Tuve que controlar más. Había mucha tensión. No minimizamos los errores y nos pasó factura. La situación era favorable y la dejamos perder", lamentó el preparador azulgrana. El club al que dirigirá hasta final de campaña -sigue insistiendo en que su salida es definitiva- se desmembró tras la expulsión de Araujo.

El espejo de resistencia, aunque fuera con once efectivos, está en el Real Madrid, frente al que ha sido incapaz de sacar ningún resutado positivo este año. Parecen resultados de otra época los triunfos que el propio Xavi logró la temporada pasada ante Ancelotti, tanto en Liga como en la final de la Supercopa. Victorias para lograr dos títulos a los que ahora se les da un valor descomunal.

El técnico catalán ha tenido esta semana que cerrar las heridas propias mientras el vestuario del FBarcelona se desmembraba públicamente. Gundogan criticó a Araújo por la expulsión: "En estos momentos cruciales debes estar seguro que puedes recuperar el balón". El uruguayo respondió asegurando que tenía "valores". No es la primera que el alemán se pronunciaba en estos términos. Fue justamente en el clásico de la primera vuelta cuando dijo la hiriente frase: “No vine para perder así”.

De cara a la opinión pública, el problema parece zanjado. "Hay situaciones en las que hay que aclarar las cosas, pero la intención de cada persona en este club es muy genuina. Queremos alcanzar nuestro potencial e intentar ganar tanto como sea posible", respondía antes del clásico el exjugador del Manchester City, quien posee una mentalidad competitiva que le impide autocensurarse cuando suceden episodios como la eliminación ante el PSG.

El desgaste físico del Real Madrid

Si hay una circunstancia de la que puede aprovecharse el Barcelona es del desgaste físico con el que el Real Madrid llega a la cita del Bernabéu. Los jugadores blancos se vaciaron en los 120 minutos del duelo frente al Manchester City. La mayoría terminaron con calambres y el desgaste obligó a futbolistas como Valverde a renunciar a tirar los penaltis.

Por suerte para los de Ancelotti, la providencia de secundarios como Lucas Vázquez resolvió la tanda decisiva después de un acoso que solo puede resistir un equipo como el Real Madrid que está diseñado para ganar. Carvajal, Vinicius y Mendy fueron los otros futbolistas que más acusaron el desgaste, acentuado en el caso de los laterales. Con todo, en la convocatoria de Carletto figuran todos los efectivos con los que puede contar.

A este nivel los jugadores están más que acostumbrados a dejarse la vida cada tres días. Además, el Real Madrid es un equipo que cada temporada, gracias a la preparación física de Antonio Pintus, alcanza el pico de forma justo en las últimas semanas de abril y las primeras de mayo, cuando se juega el todo por el todo. Esta temporada, en la que sufrido un sinfín de bajas, tan solo el Atlético ha sido capaz de hacerles hincar la rodilla. Una vez en Liga y después en Copa del Rey. Palabras mayores que demuestran el éxito de la polivalencia.

Las novedades: Tchouaméni y Christensen

Con estos antecedentes no sería de extrañar que el escenario del partido fuera similar al qude las semifinales de la Supercopa, donde un Real Madrid agazapado fusiló a la contra al Barcelona. Carletto le ganó la partida a Xavi y logró, por fin, que Vinicius superse a Araujo, que había sido su criptonita hasta entonces. El resultado final fue 4-1, mientras que en la ida de Liga Jude Bellingham, en plena efervescencia goleadora, decidió con un doblete.

El conjunto azulgrana necesita que la sangría del 1-4 ante el PSG en inferioridad no corte la mejoría defensiva que había alcanzado recientemente. Para este encuentro la gran novedad de Ancelotti será Tchouaméni, que no jugó ante el Manchester City por sanción. El italiano también anunció que Militao está disponible para ser titular después de acumular minutos en la prórroga del Etihad y apariciones testimoniales ante el Mallorca o el Athletic. Efímeras, pero que le han permitido sentirse de nuevo jugador tras un largo periodo de ausencia.

A estas alturas de la película no se esperan más grandes cambios en un Real Madrid que entiende el tramo de temporada actual como una rampa en la que cuanto más se compite más posibilidades se tiene de éxito. En el Barça uno de los alicientes es ver a Pau Cubarsí en su primer clásico. Además, Xavi recupera a Christensen, una baja capital de los azulgranas ante el PSG. Las suyas son dos actuaciones de las que depende el futuro de la Liga, coloreada de blanco desde hace meses, salvo que el todavía vigente campeón se atreva a decir lo contrario.

Ficha técnica

Real Madrid: Lunin; Carvajal, Rüdiger, Militao, Mendy; Valverde, Tchouaméni, Kroos, Bellingham; Vinícius y Rodrygo.

FC Barcelona: Ter Stegen; Koundé, Araujo, Cubarsí, Cancelo; Gündogan, Christensen, De Jong; Yamal, Lewandowski y Pedri.

Árbitro: Soto Grado (Colegio Riojano).

Estadio: Santiago Bernabéu.

Hora: 21.00/Movistar LaLiga