El Zamora Enamora sigue imparable hacia la fase de ascenso y también dio buena cuenta este viernes (86-76) de un Algeciras que llegaba muy necesitado a Zamora pero no fue capaz de hacerle frente casi nunca a un rival que se encuentra en un verdadero momento dulce de juego, desplegando un juego coral y sin descentrarse en ningún momento. El equipo andaluz tan solo fue capaz de estar dentro del partido hasta el descanso, pero en la segunda parte los de Saulo Hernández no hicieron más que incrementar su ventaja hasta alcanzar los 20 puntos de ventaja.

Uno de los asuntos que era obligado solucionar en el partido de este viernes era frenar al norteamericano Maverik Rowan que venía promediando cerca de 30 puntos en los cinco partidos que lleva en Algeciras tras llegar procedente del Huesca de LEB Oro. Saulo Hernández alternó en su defensa a Sené y a Manu Vázquez, pero al final casi todos los jugadores exteriores se fueron turnando en la siempre ingrata labor de defender a un jugador con un gran poder anotador.

Y esta primera labor no dio malos resultados porque Rowan se fue al descanso con solo nueve puntos en su casillero tras una primera parte del partido en el que el Zamora Enamora volvió a demostrar que ya funciona como un bloque después de mucho tiempo de adaptación de los jugadores que han ido llegando al equipo a lo largo de la temporada. 

Sólo habían transcurrido 4 minutos y Rowan ya había anotado siete puntos, lo que se tradujo en que Algeciras llegó a situarse 6-9. Pero Ismael Tamba decidió fajarse bajo los tableros y Kalinicenko acertaba con sus triples, para cerrar el primer cuarto con 21-21.

Rowan inició el segundo periodo anotando dos tiros libres, pero poco después Maya tuvo que sentarlo para darle un par de minutos de oxígeno. Las rotaciones en el CB Zamora seguían funcionando y ahora tomaba el relevo Jeff Solarin encadenando once puntos seguidos, pero hubo que esperar al último minuto para que la ventaja zamorana se incrementase ya significativamente, gracias a dos triples de Kalinicenko que pusieron el 44-35 del descanso.

Entró muy frío el CB Zamora en la segunda parte, tal vez por el largo descanso que se produjo con la presentación de las categorías inferiores del club, eran momentos de desconcierto e incluso Saulo Hernández tuvo que pedir un tiempo muerto con 46-41, aunque en dos minutos, las tornas habían cambiado y era el preparador del UDEA el que se veía obligado a volver a parar el partido tras dos canastas de Solarin que pusieron un 52-45 en el marcador. El pívot norteamericano del Zamora Enamora seguía enrachado y permitía con un triple lograr la primera ventaja local de 10 puntos (55-45) e incluso añadir otra canasta más para poner el 57-45.

CÓMODOS ANTE SU PÚBLICO

El Zamora Enamora jugaba a gusto frente a un rival que no tenía capacidad de reacción y en el que Rowan, ahora defendido por Round, no terminaba de aparecer y seguía con sus paupérrimos 9 puntos. 

 Y tras dos minutos sin moverse el marcador, era Marc López el que ponía el 62-48. El partido comenzó entonces a ponerse muy feo con una antideportiva y otra técnica para los andaluces que permitió al Zamora Enamora distanciarse a 17 puntos al final del tercer cuarto. 

No bajaron el nivel de exigencia los zamoranos y ya no permitieron ninguna concesión al UDEA que se dedicó a maquillar el resultado ya hasta el final pese a que consiguió acercarse hasta 9 puntos a falta de cinco minutos.