El cambio climático sacude a Villafáfila y reduce su censo de aves
Las nuevas condiciones meteorológicas minimizan la "invernada" en las Lagunas de Villafáfila y convierte a la primavera en la época más idónea para observar aves
A las diferentes especies que conviven en el paraje se han sumado dos flamencos, que se han convertido en un atractivo más de la Reserva
Aficionados, en uno de los observatorios habilitados en la Reserva Natural para disfrutar del espectáculo de las Lagunas de Villafáfila. | J. A. H. / M. J. Cachazo
Enclavada en plena ruta migratoria de cientos de especies procedentes de toda Europa, la Reserva Natural de Villafáfila es un destino idóneo para disfrutar de la naturaleza con los cinco sentidos.
Este es el objetivo de las visitas guiadas que organizan conjuntamente Zamora BioDiversa y Saliegos Birding, que atraen a amantes de la naturaleza y a aficionados a la ornitología procedentes de diferentes localidades la provincia y de otros puntos de la geografía nacional, interesados en observar las diferentes especies de aves acuáticas, esteparias y rapaces, que conviven en el paraje natural.
La celebrada este domingo ha sido la última visita guiada de este año, aunque los organizadores tienen previsto programar más a partir de enero y, sobre todo, durante la primavera, época en la que, a diferencia de lo que sucedía hasta hace pocos años, es la más idónea para observar un mayor número de aves en Villafáfila.
José Alfredo Hernández, autor del blog "Zamora BioDiversa", y uno de los guías en las visitas, reconoció que, "tradicionalmente", diciembre y enero eran los meses más atractivos para recorrer la zona, pero en los últimos años, el fenómeno biológico conocido como la "invernada" de las aves "ha disminuido radicalmente", al quedarse más al norte de Europa por diversos factores.
Lagunas de la Reserva Natural en las que conviven diferentes especies de aves. / J. A. H.
El más importante, como precisó, es el cambio climático, que ha variado el proceso de migración de las aves, que desde el norte de Europa se trasladan al sur para pasar el invierno. A modo de ejemplo, subrayó que hace tan solo dos décadas, Villafáfila era el destino elegido por hasta 30.000 ánsares o gansos, mientras que en la actualidad la concentración de ejemplares no supera los 600.
Por este motivo, en su opinión, la mejor época del año para recorrer la Reserva Natural es la primavera, por la reproducción de especies y, sobre todo, por el celo de las avutardas, cortejo que también es conocido como la "rueda".
En este punto, Hernández recordó que Villafáfila mantiene la mayor densidad mundial de avutardas, por lo que el espectáculo que brindan a los aficionados a la ornitología y a los amantes de la naturaleza en primavera es inigualable. No obstante, en la actualidad, las dos especies más numerosas en Villafáfila son la avefría y el chorlito dorado, de las que los participantes en la última visita guiada de este año pudieron observar miles de ejemplares.
Panorámica de una de las lagunas de la Reserva Natural / J. A. H.
El punto de partida del recorrido fue Otero de Sariegos, desde cuyo observatorio los visitantes pudieron disfrutar de una de las panorámicas más extensas de la laguna de la Salina Grande por su situación estratégica y que, durante el invierno, ofrece la posibilidad de seguir los movimientos de numerosos ánsares comunes.
Tras la primera parada, los participantes en la ruta recorrieron en vehículos las pistas de la Reserva natural, desde las que pudieron observar desde lugares estratégicos, con telescopios de alta precisión y prismáticos, más de 60 especies diferentes de aves, desde avutardas, hasta grullas o gansos, al margen de ejemplares de aves rapaces como milanos y azores, entre otras.
Flamencos
Incluso, pudieron observar dos flamencos en la Salina Grande, que han añadido más atractivo a la Reserva Natural, ya que es una especie cuyo avistamiento es más común en el sur de España y el norte de Portugal. No obstante, como precisó Hernández, los participantes en la visita constataron que, en la actualidad, las especies más numerosas en la Reserva son el avefría y el chorlito dorado, ya que pudieron observar alrededor de 6.000 ejemplares de cada una.
Ejemplares de diferentes especies avistados este domingo en la Reserva Natural / J. A. H.
Durante el recorrido, los participantes también contemplaron avutardas en terrenos de cultivos, aunque desde una cierta distancia porque, como matizó Hernández, es una especie a la que no está permitido "acercarse" para evitar "molestias" o que "tengan que volar", ya que esta acción les supone un "gasto energético enorme".
Los zamoranos y gallegos que participaron en la última visita de este año disfrutaron un gran espectáculo, guiados por expertos que, por su amplio conocimiento de la Reserva Natural de Villafáfila, tienen localizados los enclaves en los que se concentran más ejemplares de cada especie.
Los recorridos suelen concluir en el Centro de Interpretación de la Reserva que, como apuntó Hernández, "suple en parte, que el visitante no tenga buena óptica para ver las especies". A partir de enero, se programarán nuevas visitas guiadas a las Lagunas de Villafáfila que se anunciarán con suficiente antelación en "Zamora BioDiversa" y que ofrecen a los aficionados y amantes de la naturaleza la posibilidad de descubrir un enclave único.
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