Las lagunas de Villafáfila salen indemnes de la sequía y atraen turismo internacional

La reserva celebra el Día de los Parques Naturales en un año en el que ha conseguido salir indemne de la sequía

Imágenes de las Lagunas de Villafáfila durante el día de ayer, vistas desde los miradores de la Casa del Parque y de Otero de Sariegos, donde los visitantes recorren los humedales en busca de aves. | A. Burrieza

Imágenes de las Lagunas de Villafáfila durante el día de ayer, vistas desde los miradores de la Casa del Parque y de Otero de Sariegos, donde los visitantes recorren los humedales en busca de aves. | A. Burrieza / Irene Barahona

Las Lagunas de Villafáfila han resistido a la sequía. En mitad del mar de cereal de Tierra de Campos, empequeñecido por la falta de agua, estos humedales han celebrado durante el fin de semana el Día de los Parques Naturales, una fecha en la que se conmemora la importancia del medio ambiente y la protección de la biodiversidad, en especial, tras haber sobrevivido a la sequía.

Y es que las lagunas no han retrocedido tanto como se esperaba, e incluso, hay más agua que en muchos otros años debido a las lluvias de diciembre y enero, que han mantenido los niveles freáticos altos en Villafáfila. Gracias a este ecosistema ideal, las lagunas han conseguido atraer hacia sí una mayor cantidad de aves, que pueden observarse desde los miradores de la Casa del Parque, donde el domingo se ofrecerá el último de los talleres de avistamiento de aves por el Día de los Parques Naturales.

Así estaba Villafáfila:

La lluvia, muy esperada también más allá de los humedales, ha sorprendido durante el sábado al goteo de turistas que se desperdigaban por los miradores en torno a las lagunas. Los silenciosos visitantes de esta reserva natural proceden de ciudades como Valladolid y Madrid, pero también de otros países. Tienen en común que todos ellos han venido expresamente a conocer Villafáfila, un refugio desconocido para el turista medio, pero que se descubre como una institución para los apasionados de la observación de aves. Vienen en busca de la avutarda, la más significativa de las lagunas, ya que Zamora es uno de los reductos más importantes de esta especie, extinta en gran parte de Europa.

Las lagunas no retroceden

Las lagunas no retroceden / Irene Barahona

Ellas son a las que peor situación se les presenta por la sequía, ya que es en los campos de cereales donde habitan, tan raquíticos este año, los que mas han sufrido la escasez de agua. Como consecuencia, estas aves a penas disponen de la cobertura vegetal que necesitan para esconderse y tener a sus crías. Aunque el celo de la avutarda casi ha terminado, aún quedan unos días en los que probar suerte para verlas, sobre todo los machos, ya que las hembras se habrán escondido en los campos para incubar.

Las lagunas no retroceden

Las lagunas no retroceden / Irene Barahona

Es por eso por lo que esta época es muy especial para los visitantes, pues es uno de los momentos álgidos de anidación, donde pueden encontrar una gran concentración de especies en el momento de cría. Cigüeñelas, abocetas, pagazas piconegras, gaviotas reidoras, gansos, azulones, porrones y ánades frisos son solo algunas de las especies que se dan encuentro en este festival acuático que es Villafáfila para ellos. Una variedad y cantidad tremenda de aves en su época de cría que se complementa con aves que aún están de paso en su camino hacia el norte de Europa, como los chorlitejos grandes, las agujas colinegras y los combatientes.

Las lagunas no retroceden

Las lagunas no retroceden / Irene Barahona

Mariam Velasco y Mercedes López son dos de las visitantes de la Casa del Parque que han decidido pasar el día prismáticos en mano para observar las aves. Ellas proceden de Valladolid y reconocen que no imaginaban esto "tan bonito". Unos pasos más allá, Carlos Samaniego y Juancho San Martín son dos de los catorce amigos que han viajado desde Vitoria para darse encuentro con las avutardas, a cuya observación han dedicado tres días completos de su viaje por la provincia, los otros cuatro los han divido entre la capital y algunos puntos naturales más, como los Arribes, que han descrito como "los fiordos de Noruega". Otra integrante del grupo, Josune, se había sorprendido de la naturaleza que habían encontrado en su viaje: "Enamora", ha concluido.

Las lagunas no retroceden

Las lagunas no retroceden / Irene Barahona

Lo hace más allá de lo que se puede imaginar, porque en Villafafila no es inusual encontrar un día cualquiera a visitantes procedentes del extranjero, como en el caso de Christopher Stamp, inglés que reside en Francia y que va a pasar cuatro días recorriendo los humedales tierracampinos en busca de la avutarda: "Zamora es famosa entre los observadores de aves, en concreto, por la avutarda, hemos visto muchas en el campo", explica este gran admirador de aves que empezó su viaje en Monfragüe, y que recomienda visitar este parque, ya que es un punto de encuentro con unas aves que desaparecieron de Reino Unido hace siglos y que casi no se encuentran en Francia.

Las lagunas no retroceden

Las lagunas no retroceden / Irene Barahona

Suscríbete para seguir leyendo